Las muertes “en exceso” en Estados Unidos revelan un impacto desproporcionado del coronavirus en miembros de minorías

Un hombre es hospitalizado por coronavirus en la ciudad de Nueva York (EFE/Justin Lane/Archivo)
(JUSTIN LANE/)Durante los primeros siete meses de 2020 Estados Unidos registró unas 215.000 muertes por encima de lo habitual, de acuerdo a las últimas cifras de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), lo que sugiere que la cantidad de vidas perdidas por el coronavirus es significativamente mayor que el número oficial (174.761).
Además, más de la mitad de los muertos son miembros de minorías: afroamericanos, hispanos, nativos americanos y, en un marcado grado no reconocido hasta ahora, asiáticos americanos.
Las nuevas cifras de CDC ponen de manifiesto una marcada disparidad: las muertes entre las minorías durante la crisis han aumentado mucho más que entre los blancos.
Las autoridades de salud pública saben desde hace tiempo que algunas muertes por coronavirus, especialmente en las primeras etapas, se atribuyeron erróneamente a otras causas, y que la crisis puede haber provocado indirectamente la pérdida de muchas otras vidas al impedir o disuadir a las personas con otras dolencias graves de buscar tratamiento.
Estados Unidos ha superado las 174.000 muertes por coronavirus, aunque el número real podría ser mayor (EFE/Etienne Laurent)
(EFEI0023/)El recuento de las muertes por todas las causas durante el período de siete meses arroja lo que los expertos creen que es un cuadro más completo -y más alarmante- de la catástrofe y sus dimensiones raciales.
Estas minorías constituyen poco menos del 40% de la población de los Estados Unidos, pero representan aproximadamente el 52% de todas las “muertes en exceso” por encima de lo normal hasta julio, según un análisis de The Associated Press y The Marshall Project, una organización de noticias sin fines de lucro que cubre el sistema de justicia penal.
“El número de víctimas de la pandemia muestra cuán penetrante es el racismo estructural”, dijo Olugbenga Ajilore, economista principal del Centro para el Progreso Americano, una organización de política pública en Washington.
Los datos anteriores sobre casos, hospitalizaciones y muertes revelaron un número especialmente elevado de víctimas entre los afroamericanos, los hispanos y los nativos americanos, una disparidad que se atribuye a la desigualdad de acceso a la atención de la salud y a las oportunidades económicas. Sin embargo, hasta ahora no se había informado sobre el aumento del total de muertes por raza, ni sobre la carga desproporcionada que recaía sobre los estadounidenses de origen asiático.
Un hombre se frota los ojos mientras espera en una fila para asistir a la feria de empleo Dr. Martin Luther King Jr., realizada por el Departamento de Trabajo del Estado de Nueva York, en Estados Unidos. 12 de abril de 2012 (REUTERS/Lucas Jackson) (LUCAS JACKSON/)Con estos nuevos datos, los asiático-americanos se unen a los afroamericanos e hispanos entre las comunidades más afectadas, con un aumento de las muertes en cada grupo de al menos el 30% este año en comparación con el promedio de los últimos cinco años, según el análisis. Las muertes entre los nativos americanos aumentaron más del 20%, aunque probablemente sea un subconteo severo debido a la falta de datos. Las muertes entre los blancos aumentaron un 9%.
El número de estadounidenses de origen asiático ha recibido mucha menos atención, tal vez en parte porque las cifras que han muerto, alrededor de 14.000 más de lo normal este año, han sido mucho más bajas que las de otros grupos. Aún así, el aumento del 35% en las muertes de estadounidenses de origen asiático es el segundo más alto, detrás de los estadounidenses de origen hispano.
En un año promedio, alrededor de 1,7 millones de personas mueren en los Estados Unidos entre enero y finales de julio. Este año la cifra fue de alrededor de 1,9 millones, según los CDC.
De las posibles 215.000 muertes adicionales por encima de lo normal hasta julio, un total que desde entonces ha aumentado hasta 235.000, la mayoría se atribuyeron oficialmente a infecciones por coronavirus. El resto se culpó a otras causas, incluyendo enfermedades cardíacas, presión arterial alta y otros tipos de enfermedades respiratorias.
Un grupo de personas, con mascarilla para protegerse del coronavirus, esperanzas en fila para recibir comida donada durante la pandemia del coronavirus, el 23 de junio de 2020, en el vecindario de Corona, en Queens, Nueva York. (Foto AP / John Minchillo)Los CDC aún no ha proporcionado un desglose por raza y etnia de las muertes por otras causas. Los datos recién publicados se consideran provisionales y están sujetos a cambios a medida que llegue más información. Ciertas categorías de muertes – suicidios o sobredosis de drogas, por ejemplo – a menudo implican largas investigaciones antes de que se asigne una causa.
El efecto desproporcionado del brote en las minorías no se limita a una región específica del país.
El virus atacó por primera vez las zonas urbanas de las costas oriental y occidental. Pero según la investigadora de la Universidad de Minnesota Carrie Henning-Smith, también se han observado disparidades a medida que la enfermedad se ha ido extendiendo por todo el país a los estados del sur y del oeste con grandes poblaciones rurales.
Por ejemplo, Arizona informó de casi un 60% más de muertes de nativos americanos en lo que va de año en comparación con años anteriores, y Nuevo México registró más de un 40% más. Entre los dos estados, han muerto más de 1.100 nativos americanos más de lo normal.
Con información de AP
MÁS SOBRE ESTE TEMA:
COVID-19 y mortalidad: por qué cada vez menos pacientes mueren en unidades de cuidados intensivos
Cuáles son las zonas de Nueva York mejor preparadas para hacer frente a una segunda ola de coronavirus
El ranking de las actividades con más y menos riesgo de contagio frente al COVID-19

Joe Biden: “Es con gran honor y humildad que acepto esta nominación para presidente de Estados Unidos”

En la imagen el exvicepresidente Joe Biden. EFE /TRACIE VAN AUKEN /Archivo
(TRACIE VAN AUKEN/)El ex vicepresidente de Estados Unidos Joe Biden aceptó este jueves durante la convención del Partido Demócrata la nominación a la Casa Blanca para las elecciones presidenciales del próximo 3 de noviembre.
”Soy un orgulloso demócrata. Y estaré orgulloso de llevar la bandera de nuestro partido a las elecciones generales. Es con gran honor y humildad que acepto esta nominación para presidente de los Estados Unidos de América”, dijo Biden.
“Yo los conduciré a lo mejor de nosotros, no a lo peor. Yo seré un aliado de la luz, no de la oscuridad”, dijo Biden.
“Todas las elecciones son importantes. Lo sabemos en los más profundo de nosotros la importancia de este momento. Estos comicios nos cambiarán la vida”, agregó.
Biden comparó al ex presidente Barack Obama con Donald Trump. “Gracias, presidente. Usted fue fantástico, los niños podían verlo como ejemplo”, señaló. “Nadie dirá lo mismo sobre el presidente actual”.
Biden criticó a Trump porque “no asume responsabilidad, rehúsa liderar, se congracia con dictadores extranjeros, y se despierta cada día creyendo que el trabajo se trata de él, pero nunca sobre ustedes”.
Biden cerró la noche y la convención, que comenzó este lunes, con un discurso desde Wilmington (Delaware) en el que asumió formalmente el papel de candidato presidencial del partido para enfrentarse en noviembre al presidente estadounidense, el republicano Donald Trump.
La maestra de ceremonias es la actriz Julia Louis-Dreyfus, conocida por su papel en las series “Seinfeld” y “Veep” -en la que interpretaba a una vicepresidenta justo mientras Biden ocupaba ese cargo en la vida real-; después de tres noches presentadas por actrices: Eva Longoria, Tracee Ellis Ross y Kerry Washington.
La animación musical correrió por cuenta de The Chicks, el grupo de country femenino anteriormente conocido como Dixie Chicks, que este año cambió su nombre en plena reflexión sobre el racismo en el país; el cantautor John Legend y el rapero Common.
A lo largo de las dos horas de programa, se dirigieron a la convención virtual cuatro de los que fueron rivales de Biden en las primarias demócratas de este año: el empresario Andrew Yang, el senador Cory Booker, el ex alcalde de South Bend (Indiana) Pete Buttigieg y el ex alcalde de Nueva York Michael Bloomberg.
Tampoco faltó un homenaje al hijo mayor de Biden, Beau, que murió en 2015 a los 46 años debido a un cáncer de cerebro, y otro para el congresista demócrata y líder del movimiento por los derechos civiles John Lewis, que falleció en julio.
Otros contrincantes de Biden en las primarias, con la notable excepción del latino Julián Castro, alabarón también al exvicepresidente en un video grabado, donde se vio de nuevo a los senadores Bernie Sanders, Elizabeth Warren y Amy Klobuchar, además del excongresista Beto O’Rourke.
El toque latino lo puso el secretario de Estado de California, Álex Padilla, que habló justo antes que su homóloga de Michigan, Jocelyn Benson, y después que la congresista por Nuevo México, Deb Halaand.
Además, darán discursos el senador Chris Coons; la alcaldesa de Atlanta (Georgia), Keisha Lance Bottoms -que sonó como posible compañera de fórmula de Biden-; las senadoras Tammy Baldwin y Tammy Duckworth; el exresponsable de Salud Pública de EE.UU. Vivek Murthy, y el escritor Jon Meacham.
El cónclave demócrata, que antes del coronavirus iba a desplazar a miles de personas a la ciudad de Milwaukee (Wisconsin), se celebra en modo remoto desde distintos lugares del país y salones privados.
Con información de EFE
MÁS SOBRE ESTE TEMA:
El discurso que Joe Biden ha estado preparando durante toda su vida
Latinos en EEUU: todo lo que debes de saber para votar por correo en cada estado
Barack Obama: “Trump solo ha usado el poder de la Casa Blanca para beneficiarse a sí mismo y a sus amigos”

El fraudulento Reino de Dios

A mediados de febrero de 2014, un martes por la tarde, John Saldivar, Ministro de Seguridad Nacional de Belice, envió un mensaje de texto a Jacob Kingston, miembro de un grupo fundamentalista mormón de Salt Lake City, Utah. El ministro beliceño le estaba pidiendo un soborno a cambio de protección y favores. Para pagarle, Kingston tomaría el dinero de los cientos de millones que le había sonsacado al gobierno de los EEUU por medio de fraude, parte de los cuales había lavado a través de su iglesia.
“Cuatro de mis candidatos ya han tenido éxito en las convenciones”, escribió Saldivar. “Todo está bien hasta ahora, pero estoy sin dinero”.
La hora siguiente la dedicaron a acordar los pormenores. Kingston sugirió hacer un giro, Saldivar dijo que él mismo podía recogerel dinero en algún lugar de los Estados Unidos. Acordaron que Saldivar recogería su estipendio mensual en la Florida.
“Mi hombre se reunirá contigo en Miami. Llama a Deryl”, escribió Kingston ese jueves, refiriéndose a un socio. Pasada la medianoche de ese domingo en Utah, volvió a escribir: “¿Conseguiste lo que necesitabas?” La respuesta de Saldivar llegó tres horas más tarde. “Sí, amigo. Gracias.”
Dermen y KingstonEstos mensajes de texto se hicieron públicos durante un juicio por el mayor caso de fraude en la historia de Utah. Lev Dermen, un armenio-estadounidense vinculado con el crimen organizado, junto con Jacob Kingston y tres miembros de su familia, habían estafado al gobierno federal por 511 millones de dólares. Todas las partes fueron declaradas culpables, aunque Dermen fue el único acusado que terminó yendo a juicio puesto que los demás contribuyeron con evidencias en favor de la acusación del Estado. Lo declararon culpable de todos los cargos.
Lev Derman había emigrado a los Estados Unidos cuando era adolescente y vivió en Glendale, California, un enclave de inmigrantes armenios, donde se convirtió en empresario. Antes de ese fraude había estado involucrado en varios otros litigios penales, incluyendo un intento de secuestro y soborno de un agente del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) con el fin de que un socio mexicano extraditado cruzara la frontera.
¡Somos los mejores!
El Servicio de Impuestos Internos de Estados Unidos (IRS) incentiva la producción de combustibles renovables ofreciendo beneficios impositivos a quienes los produzcan localmente. El esquema de Utah consistía en simular la producción de combustible renovable, aunque los Kingston realmente estaban comprando y vendiendo el mismo combustible renovable a través de una red nacional e internacional de empresas. Una vez que lo pasaban, la compañía de Kingston, Washakie Renewable Energy, presentaba declaraciones de impuestos falsas que lo calificaban para recibir pagos en forma de cheques del Tesoro de los Estados Unidos por su trabajo de transformación del combustible.
Ilustración por Júlia Ledur para CLIP
Las ganancias de este fraude se lavaban a través de la iglesia y otras entidades de Jacob, y pasaba por cuentas en todo el mundo vinculadas a las numerosas conexiones de Dermen en países como Turquía, Estados Unidos, México y Belice.
Jacob Kingston (I) saludando al Presidente turco Erdogan en un evento sobre “Invertir en Turquía”Jacob Kingston es miembro de La Orden, una rama mormona fundada durante la Gran Depresión por Charles Elden Kingston como una cooperativa económica y religiosa. Originalmente se llamó la Sociedad Cooperativa del Condado de Davis y, en 1977, se registró oficialmente como iglesia en el estado de Utah bajo el nombre de Iglesia de Cristo de los Últimos Días, donde el líder de La Orden tiene estatus de profeta y predicador.
Desde entonces, la cooperativa se ha constituido como empresa, una de las tantas que poseen las familias que gobiernan la cooperativa. Se estima que tienen entre 2.000 y 6.000 miembros y regentan negocios que van desde una tienda de abarrotes hasta fábricas de armas.
La Orden tiene su sede en Salt Lake City, Utah, y es una de las pocas ramas mormonas que todavía practica la poliginia, donde los hombres tienen muchas esposas. Esta práctica es ilegal en Estados Unidos y La Orden elude las regulaciones no registrando públicamente más de un matrimonio. Las uniones adicionales, en cambio, las consideran “matrimonios espirituales”, y los certificados de nacimiento de los niños nacidos de esposas espirituales suelen ser intencionadamente ambiguos, según una acción qui tam presentada por ex miembros de La Orden.
Algunos miembros antiguos de La Orden, entrevistados por Columbia Journalism Investigations (CJI), uno de los socios de esta colaboración periodística, han vinculado el crimen de Kingston con una de las doctrinas de la organización que prescribe “Sangrar a la Bestia”. Esto ha llevado al grupo a rechazar a las autoridades y leyes externas, y a fomentar el fraude contra el gobierno de los Estados Unidos.
La doctrina determina la relación entre los miembros de La Orden tanto con el Estado como con terceros en general. Según dice la demanda qui tan presentada por ex miembros, en mayo 24 de 2019 ante la Corte Federal de Estados Unidos para el Circuito de Utah (División Central), “como ellos son el pueblo elegidos de Dios, pueden usar cualquier método disponible, legal o no, para manipular a cualquier ‘foráneo’, sea un individuo, una empresa o una entidad del gobierno, para beneficio de La Orden”. Los denunciantes arguyeron que los miembros “ni siquiera conocen las leyes del mundo exterior”.
Kent Johnson, portavoz de la Cooperativa del Condado de Davis negó tajantemente que siguieran esta doctrina. “Esas acusaciones hechas por un pequeño número de ex miembros son absolutamente falsas”, dijo .
“La Cooperativa tiene una larga historia de lo contrario(…) los miembros de la iglesia muchas veces se ven bajo escrutinio, sujetos a auditorias e investigaciones, nueve veces mayores que el promedio de la problación”, dijo Johnson, citando información de la propia iglesia.
La información pública sobre La Orden muestra que ésta ha construido una red de más de cien empresas, cuyo valor se estima en unos 11 mil millones de dólares, y que goza de una fuerza laboral subordinada que devuelve a La Orden todo el dinero que gana.
En los Estados Unidos, las organizaciones sin ánimo de lucro están exentas de impuestos. Las iglesias se consideran parte de ellas, y tienen un beneficio adicional: no están obligadas a presentar el Formulario Fiscal del Servicio de Impuestos Internos 990, diseñado para informar al público sobre los métodos de financiación de este tipo de organizaciones. La exención proviene del principio de separación de iglesia y Estado, y su objetivo es proteger a las iglesias de la intervención estatal. No obstante, dicha exención puede convertir a las iglesias en cajas negras, y resulta imposible saber cuánto dinero poseen, de dónde proviene y qué hacen con él, siempre que las iglesias no quieran revelarlo de manera voluntaria. Por este mismo motivo, el tamaño real de La Orden y de su operación continúa siendo un misterio.
El vocero de la Cooperativa, Johnoson, dijo que “no estamos en libertad de divulgar información sobre la membresía activa (de la iglesia)”.
El caso por fraude contra la Washakie Renewable Energy abrió una ventana inusual hacia el interior de La Orden. En sus declaraciones de culpabilidad, Jacob y su hermano Isaiah Kingston admitieron destinar parte de las ganancias resultantes del fraude a la consolidación y manutención de La Orden, y a circular dinero por medio de compañías relacionadas con ésta. Usaron incluso la Iglesia de Cristo de los Últimos Días para lavar los réditos. Sin embargo, en el juicio no se demostró que la Cooperativa —como institución — hubiese aprobado el uso de sus cuentas para cometer el fraude.
En 2013 Jacob Kingston y su hermano Isaiah transfirieron 5,6 millones de dólares de ganancias fraudulentas desde la cuenta bancaria de la Washakie Renewable Energy a la de A-Fab Engineering Inc., compañía propiedad del grupo religioso. De ahí, la mayor parte del dinero pasó a Fidelity Funding Inc., que es el “banco” de La Orden, y una parte menor a Standard Industries Inc. Unos días más tarde, un total de 4,69 millones de dólares pasó de estas dos compañías a la cuenta bancaria de la Iglesia de Cristo de los Últimos Días, en el Bank of Utah.
Al día siguiente un giro de 4,5 millones de dólares salió de la cuenta de la Iglesia de Cristo y pasando por Equitable Funding, volvió a la cuenta de Washakie. La transacción se registró como fondos provenientes de Alliance Investments.
El dinero del fraude de Washakie también se destinó a otros emprendimientos y con frecuencia salió de Utah y dio la vuelta al mundo por medio de las conexiones de Dermen, quien no era integrante de la Cooperativa. En su tercer día en el estrado, durante el juicio a Washakie, Jacob Kingston reveló otra operación que involucraba llenar los bolsillos de funcionarios electos y de alto nivel en Belice.
Buena parte de las conexiones de Dermen en Belice provenían de una persona, Zubir Kazi. A Kazi se le conocía por tener franquicias del restaurante KFC alrededor del mundo y estaba bien conectado en la nación caribeña. Según su testimonio, él y Dermen llevaban diez años siendo amigos. En ese tiempo, Kazi presentó a Dermen ante John Saldivar, entonces Ministro de Seguridad Nacional y Ralph Fonseca, entonces Ministro de Hacienda, entre otros.
Jacob y Dermen viajaron juntos a Belice para desarrollar proyectos con su mal habido dinero. En su testimonio, Jacob habló de este viaje.
“En Belice nosotros estabamos considerando un casino online”, dijo. “Nosotros íbamos a empezar un casino online allí, y un casino físico allí”.
Jacob admitió haber comprado una bodega para instalar en ella el casino de Belice con fondos del fraude fiscal. Según Kazi, el ex Ministro de Hacienda Ralph Fonseca se prestó como agente de fideicomiso en el negocio de la bodega. Irwin Contreras, otro funcionario beliceño que supervisaba la adjudicación de licencias de juegos en la época, ayudó a Lion Gaming Inc., una compañía creada por uno de los abogados de La Orden, a conseguir su licencia oficial.
Dermen y Kingston posando delante de sus autos deportivos.
Mientras tales acusaciones salían a la luz durante el juicio de Dermen, que duró hasta principios de 2020, John Sandivar se preparaba para volverse el próximo Primer Ministro de Belice, pues había sido elegido presidente del Partido Democrático Unido el 9 de febrero de este año. Poco después, debido a la evidencia de haber recibido sobornos, presentada en la corte de Utah, se vio obligado a renunciar.
Los hermanos Jacob e Isaiah se declararon culpables de un cargo que describe la conspiración que usó a la iglesia y a otras entidades de La Orden para lavar dinero. Cuando CJI le preguntó al vocero de la Cooperativa, Kent Johnson, sobre el papel de la iglesia en el fraude, respondió: “Que yo sepa, cualquier dinero pagado a negocios propiedad de los miembros de la DCCS (sigla en inglés de la Sociedad Cooperativa del Condado de Davis) obedeció a servicios legítimos prestados o para reembolsar dinero prestado al señor Kingston o a entidades relacionadas con WRE ( Washakie Renewable Energy).
Si bien los documentos judiciales ya revelan el origen ilícito de algunos fondos de la Orden, los fiscales planean investigar más a fondo. La oficina del Fiscal de los Estados Unidos en Salt Lake City cree que sus próximos pasos de la investigación “involucrarán el rastreo y seguimiento de los ingresos hacia y a través de estas cuentas bancarias de entidades relacionadas con La Orden”, según dijo su portavoz Melodie Rydalch a CJI.
Por el momento, siguen gozando de las protecciones constitucionales en su calidad de grupo religioso registrado con estatus oficial de iglesia.
Dos miembros de alto rango de La Orden usaron cuentas bancarias de la iglesia para lavar el dinero del fraude con energía renovable y están cumpliendo condena. Ni el líder máximo de la iglesia Paul Kingston, ni la Cooperativa Davis (la iglesia) han sido implicados legalmente. La iglesia sigue apareciendo en la lista de iglesias exentas de impuestos del Servicio de Impuestos de Estados Unidos (IRS es su sigla en inglés). Este equipo periodístico quiso ampliar la información con el IRS, pero éste respondió que la ley federal impide a la institución comentar públicamente sobre contribuyentes.
Así las cosas, la Iglesia de Cristo de los Últimos Días puede seguir certificándole a sus donantes que está exenta de impuestos ante el IRS, y que por lo tanto puede recibir donaciones sin reportarle al gobierno
Paraísos de dinero y fe fue realizada en conjunto por Columbia Journalism Investigation (CJI), Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP), Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (México), Nómada (Guatemala), Canal 13 Noticias (Costa Rica), IDL-Reporteros (Perú), Infobae (Argentina), Agencia Publica (Brasil), Folha Sao Pablo (Brasil), La Diaria (Uruguay), El Tiempo (Colombia) y OCCRP (Europa), con el apoyo de la Seattle International Foundation.
Más sobre este tema:
La oscura historia del apóstol Naasón y su iglesia La Luz del Mundo
Paraísos de Dinero y Fe: cómo el crimen organizado utiliza las iglesias para negocios turbios
La Iglesia Universal del Reino de Dios en Argentina, bajo sospechas de lavado de dinero: investigan millonarias donaciones anónimas

Joe Biden aceptará la nominación a la presidencia de Estados Unidos en el cierre de la Convención Demócrata

Más de tres décadas después de su primer intento en llegar a la Casa Blanca, Joe Biden aceptará este jueves la nominación como candidato presidencial de los demócratas para enfrentarse en noviembre a Donald Trump, en una elección marcada por la crisis sanitaria por el coronavirus.
“Hoy vamos a discutir los planes para reconstruir de una forma mejor esta nación y llevarla por una nueva vía”, dijo el ex vicepresidente norteamericano durante la presidencia de Barack Obama en un tuit antes de su discurso de aceptación en la noche, que debido a la crisis del coronavirus hará de forma virtual desde su residencia en Wilmington, Delaware, siguiendo la estela de una campaña marcada por la pandemia.
El evento es transmitido en vivo tanto por las principales cadenas televisivas como por el Partido Demócrata.
Biden es, a sus 77 años, parte del grupo de riesgo y su campaña se ha caracterizado por apariciones contadas, muchas de ellas desde el sótano de su casa.
Su discurso marca el final de la convención demócrata, que debía celebrarse en Wisconsin pero terminó siendo casi completamente virtual debido a la pandemia del coronavirus, que ha dejado más de 170.000 muertos en Estados Unidos.
Trump seguirá la estrategia que mantuvo desde el inicio de la convención rival organizando un mitin simultáneo. Este jueves visitará Old Forge una localidad en Pensilvania cercana al pueblo donde nació Biden. Durante toda la semana ha visitado distintas localidades en estados pendulares que cambian de una elección a otra, desde Wisconsin, a Arizona y pasando también por Iowa.
Steve Bannon, el asesor más importante y polémico de Trump por sus posiciones extremistas, comenzó su ocaso el 5 de abril, cuando fue removido de su puesto en el Consejo de Seguridad Nacional (AFP)Un ex consejero de Trump acusado de fraude
Este jueves los demócratas recibieron la noticia de que Steve Bannon, ex consejero de Trump, fue arrestado y acusado de defraudar a ciudadanos que donaron dinero para construir un muro en la frontera con México. Pero en un formato de discursos que en su mayoría ya fueron grabados y están listos para ser emitida, no está claro si van a poder aprovechar esta información para su fiesta electoral.
La campaña en línea de Bannon recaudó más de 25 millones de dólares, según los fiscales.
Trump se desmarcó rápidamente y la Casa Blanca afirmó que no estuvo “nada involucrado” en el proyecto de Bannon. Más tarde desde la Oficina Oval dijo que no sabía “nada de este proyecto”. “No he tenido contacto con él desde hace mucho tiempo”, agregó.
Kamala Harris durante la ceremonia de aceptación de su candidatura a la vicepresidencia de Estados Unidos celebrada en el marco de la convención del Partido Demócrata en el Chase Center de Wilmington, estado de Delaware (REUTERS/Kevin Lamarque) (KEVIN LAMARQUE/)Kamala Harris, candidata a vicepresidenta
El miércoles la compañera de fórmula de Biden, Kamala Harris, hizo historia como la primera mujer afroamericana en ser nominada por un partido mayoritario como candidata a la vicepresidencia. “El fracaso de liderazgo de Donald Trump ha costado vidas y sustento”, advirtió.
Además instó al electorado a elegir el 3 de noviembre a un presidente que pueda unir a “negros, blancos, latinos, asiáticos, indígenas” y no convertir “nuestras tragedias en armas políticas”.
En la noche del jueves están previstas las alocuciones de Cory Booker, Micheal Bloomberg, Pete Buttigieg y Andrew Yang, que formaron parte del numeroso pelotón de precandidatos demócratas en la carrera que finalmente ganó Biden.
El tono probablemente confirme el mensaje que los demócratas han emitido durante todo el cónclave: el gobierno de Trump es un caos y, como advirtió el miércoles Hillary Clinton, si es reelegido, “las cosas serán aún peor”.
Los demócratas buscan cimentar la unidad del partido, alejando los fantasmas que dejó el cónclave de 2016, cuando se hizo evidente un cisma entre la entonces candidata Hillary Clinton y los sectores más progresistas identificados con el senador Bernie Sanders.
El ex presidente de Estados Unidos Barack Obama pronunció un duro mensaje contra Donald Trump durante la Convención Nacional Demócrata del miércoles (Convención Nacional Demócrata 2020/Pool vía REUTERS) (POOL New/)En su discurso el lunes, Sanders destacó que “Joe Biden va a terminar con el odio y la división creados por Trump”.
Obama abandonó el jueves una regla no escrita entre los ex presidentes de mantenerse al margen de la política de su sucesor y afirmó que Trump ha tratado la presidencia como un “reality show” y ha dejado las “instituciones democráticas amenazadas como nunca antes”.
Trump respondió con fuerza afirmando que Obama fue un presidente “espantoso” y lo tildó además de “ineficaz”.
Los demócratas esperan que la fórmula Biden-Harris pueda abarcar al electorado más tradicional que se siente reafirmado con la experiencia del ex vicepresidente y a un votante más joven, ávido de cambio y una mayor diversidad en la política.
En cuanto a los republicanos, su convención tampoco escapará del formato virtual y ya está rodeada de polémica por el anuncio de Trump de que recibirá la nominación de la Casa Blanca, rompiendo el mandato de separar sus actividades de gobierno de su campaña.
Con información de AFP
MÁS SOBRE ESTE TEMA:
Latinos en EEUU: todo lo que debes de saber para votar por correo en cada estado
Barack Obama: “Trump solo ha usado el poder de la Casa Blanca para beneficiarse a sí mismo y a sus amigos”
Harris aceptó la nominación a la vicepresidencia del partido demócrata y criticó a Trump por el manejo de la pandemia

El discurso que Joe Biden ha estado preparando durante toda su vida

Joe Biden (EFE /TRACIE VAN AUKEN /Archivo) (TRACIE VAN AUKEN/)WILMINGTON, Delaware — Durante sus casi cincuenta años en la vida pública, Joe Biden ha pronunciado muchos discursos: buenos, malos, de inicio de campaña y de admisión de su derrota, discursos sin los créditos debidos a las fuentes originales, discursos tan característicos de Biden que nadie podría acusarlo de mejorar nada.
“Nadie puede dudar de que en verdad pienso lo que digo”, suele decir Biden, de 77 años, al público. “El problema es que a veces digo todo lo que pienso”.
Lo que quiere decir el jueves, cuando acepte la candidatura demócrata a la presidencia en el discurso más importante —y probablemente el más surreal— de su carrera, ha sido algo que se ha estado gestando durante muchas décadas, desde que llegó a la escena nacional a los 29 años como senador electo y suscitó los primeros rumores de su presidencia poco tiempo después.
Así que, según sus amigos, ya se esperaban algunos aspectos de su proceso de preparación: consultas con un grupo de familiares y sus asesores más antiguos, que incluyen a su hermana Valerie Biden Owens, a su esposa, Jill Biden, y a su estratega principal, Mike Donilon; y modificar varias veces sus borradores, lo que refleja su añeja costumbre de hacer correcciones hasta el final, por lo general a mano. Biden y su equipo también han conversado con amigos cercanos y con otras personas que admira sobre los giros discursivos y temáticos. Jon Meacham, el historiador en temas relacionados con los presidentes, ha participado en ese proceso. (El título de un libro reciente de Meacham, “The Soul of America” [el alma de Estados Unidos] ha sido retomado por Biden a lo largo de su campaña).No obstante, en esta semana, otros aspectos de esta tarea eran menos conocidos. A saber: la planeación para formular comentarios casi sin público —algo inquietante para un político que durante mucho tiempo se ha nutrido de la energía de las multitudes— y dejar que sus principales partidarios descorchen botellas de confeti miniatura (provistas por el equipo de Biden para festejar en solitario), en medio de una pandemia que ha cobrado la vida de más de 170.000 estadounidenses.
Las personas cercanas a Biden dicen que su discurso fue diseñado para que sea acorde con este momento: más solemne que jubiloso, más moderado que vanaglorioso, en su intento más ambicioso hasta ahora para ofrecerle al pueblo estadounidense la imagen de un liderazgo firme y de unidad nacional frente a las crisis extraordinarias.
“Los tiempos exigen un tipo de discurso diferente”, señaló el ex gobernador demócrata de Virginia, Terry McAuliffe, un aliado cercano de Biden. “Este es un discurso diferente, es un momento diferente, como quizás ningún otro desde los tiempos de Roosevelt cuando nos enfrentábamos a una guerra mundial y enfrentábamos una depresión económica. Se trata de un discurso muy importante”.
Cuando le preguntaron a McAuliffe cuánto tiempo había estado Biden preparando su presentación del jueves, respondió: “Toda su vida”.
En el caso de Biden esa afirmación no es, del todo, una exageración. Antes de cumplir 30 años, y desde un legendario hotel en Wilmington, Biden lanzó su candidatura al Senado —que tenía muy pocas probabilidades de tener éxito— con un discurso en el que censuraba la desunión y pregonaba el optimismo acerca de las capacidades del pueblo estadounidense. Aproximadamente cinco décadas después, se espera que el jueves aborde temas parecidos en sus comentarios desde el centro de conferencias aquí mismo, a menos de 3 kilómetros del hotel donde inició su carrera política.
Valerie Biden en un acto de campaña en New Hampshire en febrero de 2020. REUTERS/Carlos Barria (CARLOS BARRIA/)“Esperaría que siguiera el mismo proceso que ha usado durante años”, dijo el senador demócrata de Delaware, Chris Coons, un aliado cercano de Biden quien comentó que el domingo tuvieron una conversación. “Les preguntas a los asesores externos. Los mensajes, las encuestas y los asesores políticos te dan cierta estructura. Luego te apartas y lo planteas. Después lo compartes con la gente que te conoce (literalmente habla con su hermana): tu hermana, tu esposa, tus asesores políticos más cercanos. Te dan algo de retroalimentación. Posteriormente, vas y lo piensas un poco más. Y luego pronuncias tu discurso”.
Aunque todas las figuras políticas prominentes se convierten en oradores públicos avezados a fuerza de repetición, para Biden este es un acto casi definitorio. Al superar su tartamudez desde su juventud, Biden se forjó una reputación a nivel nacional construida en gran medida gracias al poder, la preponderancia y la precariedad más que ocasional de sus palabras.
Matt Teper, un escritor importante de los discursos de Biden durante su vicepresidencia, insinuó que es tanta la atención que le presta a los detalles, que puede rayar en la obsesión. “Tenemos un jefe comprometido”, afirmó. “También tenemos a alguien que, cuando se trata de la redacción, se preocupa por cosas que en ocasiones decimos: ‘Bueno, yo me encargo de las comas’. Pero, en general, su implicación hace que las cosas salgan mejor”.
Teper vaticinó que las últimas ediciones del jueves se harían incluso “una o dos horas antes”… o tal vez de manera improvisada. “Biden cambiará cosas conforme las pronuncie”, señaló Teper, “para mejorarlas”.
Desde luego, las palabras de Biden no siempre han sido cuidadosas. Su primera candidatura a la presidencia, para la campaña demócrata de 1988, terminó en una granizada de acusaciones de plagio. La siguiente, 20 años después, reafirmó la impresión de insensatez verbal casi de inmediato cuando Biden dio una entrevista en la que señaló a Obama, su compañero en la contienda, como “el primer afroestadounidense popular que es articulado, brillante, limpio y guapo”.
Cuando Biden se convirtió en el vicepresidente de Obama, en ocasiones su imprudencia decepcionaba a los asesores de la Casa Blanca y cimentaba la reputación de Biden como una especie de tío cuentacuentos, propenso a la exageración o a las blasfemias frente a un micrófono. Durante la campaña, con frecuencia se salía del guion y daba rodeos y traspiés verbales, y a veces hacía relatos imprecisos que tenía que rectificar.
Sin embargo, no es coincidencia que muchas familias le hayan confiado a Biden la tarea más sagrada de los discursos: repartir elogios. Su conocimiento de la aflicción y la resiliencia se forjó a través de su propia suerte sombría, cuando tuvo que enterrar a su primera esposa e hija —quienes murieron en un accidente automovilístico luego de su primera elección al Senado— y a su hijo Beau, quien falleció de cáncer en el cerebro en 2015.
Las habilidades que ha desarrollado como apolologista —una capacidad para transmitir empatía y un espíritu de optimismo a las personas que se enfrentan a una pérdida inconmensurable— quizás forman parte de la preparación sustancial para el discurso de candidatura que pronunciará ante un país afligido que enfrenta un futuro incierto.
“Va a demostrarle al pueblo que va a establecer contacto con personas de carne y hueso”, señaló la representante demócrata de Michigan, Debbie Dingell. “Que entiende que están asustadas”.
Biden llegó a la semana de la convención cuando acababa de elegir a una contendiente para la vicepresidencia. Mientras elegía a la senadora de California, Kamala Harris, tuvo conversaciones profundas con una lista de candidatos que representaban a una diversa gama de estados y de experiencias políticas personales, y muchos demócratas dijeron que esperaban que ese proceso también hubiera transmitido sus ideas sobre cómo iba a dirigirse a la nación.
“Estoy segura de que así será”, afirmó la representante demócrata de Delaware, Lisa Blunt Rochester, copresidenta del comité encargado de buscar candidatos a la vicepresidencia de Biden. “Creo que sus historias personales son representativas de Estados Unidos. Creo que todo eso alimentará los comentarios que haga. Pero, a fin de cuentas, creo que en realidad va a concentrarse en la resiliencia de nuestro país y en la futura dirección que tomaremos”.
*Copyright: 2020 The New York Times Company

Michael Bloomberg y su participación en el cierre de la Convención Nacional Demócrata

El magnate y ex candidato presidencial del Partido Demócrata, Mike Bloomberg. Foto: REUTERS/Carlo Allegri (CARLO ALLEGRI/)El magnate y ex alcalde de Nueva York Michael Bloomberg será uno de los oradores que tendrá un lugar preponderante en el cierre de la Convención Nacional Demócrata, que de convencional ha tenido poco, considerando el hecho de que se lleva a cabo de manera virtual por la pandemia de coronavirus.
Bloomberg, quien también llevó a cabo una breve e infructuosa campaña presidencial, hablará en la misma noche en la que Joe Biden aceptará su candidatura con un discurso que, según se anticipa, será un llamado a la unión del pueblo norteamericano y reafirmará la necesidad de salir a votar. La presencia del magnate, no obstante, ha generado controversia. Numerosos miembros del partido, especialmente, aquellos del ala progresista la han criticado. E incluso hay quienes buscan que se cancele su discurso.
No obstante, Bloomberg ha sido durante los últimos años una de las figuras que mayor cantidad de dinero donó al partido. Y sus vínculos con líderes históricos contribuyeron que garantice su lugar en el listado de oradores.
En el 2018, el ex alcalde invirtió USD 100 millones para asegurarse que los demócratas recuperaran la camara baja del Congreso, algo que finalmente sucedió. Pero durante la campaña presidencial, buena parte del partido fue extremadamente crítica del hecho que se postulara y usara grandes cantidades de su propio dinero -mucho más que sus contendientes- para financiar sus intenciones.
Bloomberg decidió presentarse como candidato a presidente por el partido demócrata entrando a unas primarias ya avanzadas: sólo restaban 10 semanas para la votación. En consecuencia, no participó de los comicios en los primeros estados ni de los primeros debates. Su decisión, según su consejero politico Howard Wolfson se debió a no sentir que los candidatos demócratas fueran lo suficientemente fuertes y bien posicionados para vencer al Presidente Trump.
En los pocos meses que duró su campaña Bloomberg invirtió en ella USD 600 millones de su fortuna. Esto, lejos de favorecerlo, hizo que lo comparasen con Donald Trump y resaltaran sus lazos con las elites financieras de Wall Street. Bernie Sanders lo acusó de querer comprar la elección.
Otra fuente de críticas fue el hecho de que tuviera acuerdos de no divulgación con distintas mujeres que, a lo largo de los años, lo habrían acusado de acoso. Elizabeth Warren, senadora demócrata por el estado de Massachussets y ex candidata presidencial, criticó duramente a Bloomberg por el tema en uno de los debates. En un recordado momento, la senadora retó a Bloomberg a liberar a las mujeres de los acuerdos para que pudieran hablar de sus denuncias.
Luego de ese debate y los pobres resultados en sus primeras elecciones primarias, Bloomberg decidió retirarse y dar su apoyo a Biden y a todo el aparato demócrata para desalojar a Trump de la Casa Blanca.
Foto: Reuters (JONATHAN ERNST/)Desde entonces, el magnate prometió volcar millones de su fortuna personal a la campaña creando un Super PAC donde emplearía a todos los que se encontraban trabajando en su campaña. No obstante, pocos días después cambio de idea y optó por donar USD 18 millones Comité Nacional Demócrata para volcarlos en la obtención de bancas en las legislaturas estatales.
De esta manera, dejó sin trabajo a su numeroso staff. Muchos de ellos han presentado cargos en su contra por no haber cumplido con su promesa y haberlos dejado en la calle en medio de una pandemia, sin sueldo y sin cobertura médica. Ante ello, Bloomberg decidió finalmente despedirlos pero mantenerles la cobertura medica hasta el mes de noviembre.
Es en este contexto que Bloomberg hará su aparición esta noche. Más allá de sus controversias personales, el magnate buscará mostrar a Biden como el único candidato capaz de sacar a los Estados Unidos de la crisis económica que atraviesa como consecuencia de la pandemia. Para ello, recordará el éxito tenido a la hora de lidiar con la crisis financiera de 2008, en la que ambos trabajaron estrechamente dado que Bloomberg ocupaba en ese momento la alcaldía de Nueva York.
Más sobre este tema:
Convención demócrata: noche repleta de mujeres para la presentación oficial de Kamala Harris
Latinos en EEUU: todo lo que debes de saber para votar por correo en cada estado

Barack Obama: “Trump solo ha usado el poder de la Casa Blanca para beneficiarse a sí mismo y a sus amigos”

Former U.S. President Barack Obama speaks by video feed during the virtual 2020 Democratic National Convention as participants from across the country are hosted over video links from the originally planned site of the convention in Milwaukee, Wisconsin, U.S. August 19, 2020. 2020 Democratic National Convention/Pool via REUTERS (POOL/)El ex presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, dio este miércoles un duro discurso en contra de su sucesor, Donald Trump, a quien contrastó con quien fue su vicepresidente y contendiente en las próximas elecciones, Joe Biden.
Desde el museo de la revolución estadounidense, en la ciudad de Filadelfia, el ex mandatario aseguró que si bien no esperaba que Trump “continuara con sus políticas al ganar la elección”, sí “albergaba esperanzas de que mostrara algún interés en tomarse el trabajo con seriedad”.
Sin embargo, aseguró, esto nunca sucedió. “Nunca mostró interés en hacer el trabajo. En encontrar un punto medio en las disputas; en usar el increíble poder de su puesto para beneficiarse a alguien que no sea sí mismo o sus amigos; ningún interés en tratar la presidencia como algo más que otro reality show que puede usar para recibir la atención que tanto desea”.
Y agregó: “Donald Trump no ha crecido al obtener su puesto porque no puede. Y las consecuencias de esa imposibilidad son severas. 170.000 estadounidenses muertos. Millones de puestos de trabajo que desaparecieron. Nuestros peores impulsos desatados, nuestra orgullosa reputación alrededor del mundo fuertemente dañada, y nuestras instituciones democráticas amenazadas como nunca antes”.
Obama buscó a su vez enfatizar la fuerza de su mensaje al mencionar con nombre y apellido a Trump. Si bien ha realizado numerosos análisis críticos de la situación del país y de la administración a cargo de la Casa Blanca, interpelar directamente al mandatario es algo que solía evitar en sus apariciones públicas.
Foto: 2020 Democratic National Convention/via REUTERS (POOL/)En otro pasaje de su discurso, el ex mandatario combinó nuevas críticas a Trump con halagos a Joe Biden al contrastar a ambos políticos. Y remarcó que su ex vicepresidente lo hizo un mejor jefe de Estado.
“Hace doce años, cuando comencé a buscar un vicepresidente, no sabía que encontraría un hermano. Joe y yo proveníamos de distintos lugares y distintas generaciones. Pero lo que rápidamente comencé a admirar de él es su resiliencia, causada de demasiadas luchas; su empatía, causada por demasiado luto. Joe es un hombre que ha aprendido a tratar a todas las personas que conoce con respeto y dignidad, honrando las palabras de sus padres: ‘nadie es mejor que tí, pero tú no eres mejor que nadie”, expresó.
Y agregó: “A lo largo de ocho años, Joe fue la última persona en la sala cuando enfrentaba una decisión importante. Me hizo un mejor presidente. Tiene el carácter y la experiencia para convertirnos en un mejor país”.
Horas antes de la transmisión del discurso, pero luego de que su contenido tomara estado público, Trump criticó las palabras de Obama y lo calificó como un presidente “espantoso”. “El presidente Obama no hizo un buen trabajo. La razón por la que estoy aquí es por el presidente Obama y Joe Biden”, expresó en una conferencia de prensa que tuvo lugar en la Casa Blanca.
Noticia en desarrollo…

Hillary Clinton: “No importa lo que suceda, vayan a votar”

Former U.S. Secretary of State Hillary Clinton speaks by video feed during the virtual 2020 Democratic National Convention as participants from across the country are hosted over video links from the originally planned site of the convention in Milwaukee, Wisconsin, U.S. August 19, 2020. 2020 Democratic National Convention/Pool via REUTERS (POOL/)Después de más de cuatro décadas en la vida pública, Hillary Clinton regresó el miércoles a la Convención Nacional Demócrata para cimentar su legado como defensora del lugar de las mujeres en la política, e hizo un fuerte llamado para que la gente acuda a las urnas, sobre todo aquellos convencidos de que Joe Biden ganará.
En su discurso, Clinton reflexionó sobre su derrota ante Donald Trump en 2016 e instó a los estadounidenses a no dar por sentado el resultado de la elección, después de que algunos votantes se quedaran en casa en 2016.
“Durante cuatro años, la gente me ha repetido: ‘No me di cuenta de lo peligroso que era’, ‘ojalá pudiera volver atrás y hacerlo de nuevo’. O peor aún: ‘debería haber ido a votar’. Bueno, esto puede ser otro ‘no me di cuenta’, ‘ojalá pudiera volver atrás’, ‘debería haber hecho otra cosa’“, afirmó la también ex primera dama.
“No importa lo que suceda, vayan a votar. Voten como si nuestras vidas y su sustento estuvieran en juego, porque lo están”, enfatizó la demócrata.
Cuatro años después de hacer historia como la primera mujer nominada a la presidencia por uno de los dos partidos centrales, Clinton apeló a otro legado perdurable: los millones de mujeres inspiradas en su candidatura de 2016 que marcharon, se postularon para un cargo y que, hoy, se han convertido en una fuerza poderosa contra el presidente Trump.
Su discurso tuvo lugar en la noche en que la senadora por California, Kamala Harris, se convertirá en la primera mujer afroamericana en aceptar la candidatura a vicepresidente y un día después del centenario del sufragio femenino.
“Se necesitaron siete décadas de sufragistas marchando, haciendo piquetes y yendo a la cárcel para acercarnos a una unión más perfecta”, dijo Clinton. “Hace cincuenta y cinco años, John Lewis marchó y sangró en Selma porque ese trabajo estaba inconcluso”, añadió.
Hillary Clinton habla en la Convención Nacional Demócrata. Foto: 2020 Democratic National Convention/via REUTERS (POOL/)Clinton, que perdió la presidencia a pesar de ganar el voto popular por casi 3 millones de votos, es una figura complicada en la cultura política estadounidense. Muchos republicanos la desprecian y algunos progresistas la ven con recelo.
La ex candidata también dedicó parte de su discurso a criticar enfáticamente a Trump. “Desearía que supiera como ser presidente”, expresó. Y, en referencia a la pandemia de coronavirus, agregó: “necesitamos líderes que estén a la altura de este momento de sacrificio y servicio. Necesitamos a Joe Biden y Kamala Harris”.
Clinton también mencionó de manera indirecta los ataques recibidos desde el partido republicano durante su campaña y aseguró que Harris podrá encajarlos. “Se algo de lo que enfrentará, y sé que puede lidiar con todos ellos”, dijo. “(Biden y Harris) Son capaces de sacar al país del borde del precipicio”.
El discurso del miércoles fue el sexto que Clinton dio en una Convención Nacional Demócrata. Su primer discurso tuvo lugar en 1996, cuando la entonces primera dama enfrentó críticas por el escándalo de Whitewater y por tener demasiada influencia en la política del Gobierno de su esposo, Bill.
En 2000, Clinton habló como candidata al Senado, y en 2004, la entonces senadora de Nueva York fue la encargada de presentar a su esposo. Estuvo en el escenario en 2008 después de su primera candidatura presidencial, respaldando a Barack Obama, el hombre ante quien perdió la nominación y en cuya administración se desempeñó más tarde como secretaria de Estado. En 2016, como la nominada, dijo a los delegados: “Acabamos de abrir la grieta más grande en el techo de cristal hasta ahora”.
MÁS SOBRE ESTE TEMA:
Barack Obama, Hillary Clinton y Kamala Harris liderarán la tercera jornada de la Convención Nacional Demócrata
Joe Biden fue nominado como candidato presidencial del partido demócrata para las elecciones de Estados Unidos
Quién es Jack Schlossberg, el último nieto de JFK que participó de la Convención Nacional Demócrata

Barack Obama, Hillary Clinton y Kamala Harris lideran la tercera jornada de la Convención Nacional Demócrata

Tres figuras históricas del partido demócrata encabezan en la noche del miércoles la tercera jornada de la Convención Nacional: Barack Obama, el primer presidente afroamericano de la historia; Hillary Clinton, la primera mujer en ser candidata a jefe de Estado en el país; y Kamala Harris, la primera mujer afroamericana en integrar una fórmula presidencial.
Todos ellos continuarán enfatizando el mensaje central del partido de cara a los comicios del 3 de noviembre: la necesidad de salir a votar para desbancar a Donald Trump de la Casa Blanca.
El evento comenzó a las 9:00 PM, hora del Este de Estados Unidos. Es conducido por la actriz Kerry Washington y transmitido en vivo tanto por las grandes cadenas televisivas como el Partido Demócrata.
Harris hizo una aparición especial al comienzo de la noche para volver a llamar a votar masivamente y criticar a la administración de Donald Trump por realizar acciones destinadas a reducir las posibilidades de hacerlo por correo, alternativa que se prevé sea usada de manera masiva en el marco de la pandemia.
“¿Por qué no quieren que salgamos a votar? Porque quieren silenciar nuestras voces. Cuando votamos las cosas cambian, se vuelven mejores. Necesitamos un plan para votar y Joe y yo queremos que estén preparados”, dijo Harris, antes de anunciar un número de teléfono al que enviar mensajes para recibir consejos para garantizar el voto por correo.
Obama, quien brindará el último discurso de la noche, asegurará que “la democracia del país estará en juego” en los próximos comicios. Según se desprende de pasajes de su discurso que han tomado estado público, dirá que Trump “no ha mostrado interés en hacer el trabajo necesario” y que ha “tratado la presidencia como solo otro reality show que puede usar para recibir la atención que tanto desea”.
El expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, durante el funeral del congresista John Lewis, en la Iglesia Bautista Ebeneezer, en Atlanta, Georgia, EEUU. Julio 30, 2020. Alyssa Pointer/vía REUTERS (ALYSSA POINTER/)Desde el museo de la revolución estadounidense, en la ciudad de Filadelfia, el ex mandatario (2009-2017) dirá que como consecuencia de la elección, “Estados Unidos mostró sus peores impulsos, socavó su reputación global y sus instituciones democráticas como nunca antes”.
Clinton, quien perdió en las elecciones del 2016 contra Trump pese a haberse hecho con el voto popular, urgirá a los votantes a acudir a las urnas aún si están convencidos de que Biden se alzará con la victoria.
Para fundamentar su pedido, la ex secretaria de Estado indicará que un factor de su derrota en los comicios fue precisamente ese: que personas no votaran porque daban su victoria por sentado.
“A lo largo de cuatro años, distintas personas me han dicho ‘no me había dado cuenta de lo peligroso que era’, o ‘desearía poder volver en el tiempo y tomar una decisión distinta’. O peor, ‘debería haber votado’. Bueno, esta no puede ser una elección de la misma naturaleza”, dirá.
La ex secretaria de Estado, Hillary Clinton. Foto: Jörg Carstensen/dpa
(Jörg Carstensen/dpa/)Por su parte, Kamala Harris hablará desde el estado de Delaware, estado en el que vive Biden y donde su campaña tiene el cuartel general. La senadora de California, que aceptará oficialmente su nominación, “presentará una visión para una nación más inclusiva en la que todos sean bienvenidos y tengan iguales oportunidades ante la ley”, indicó uno de sus asesores a CNN.
También remarcará la necesidad de elegir a Biden, presentando a su compañero de fórmula como un líder único para este momento” y marcando un claro contraste con Donald Trump, a quien volverá a criticar con énfasis.
La aspirante a la nominación demócrata a la vicepresidencia de Estados Unidos Kamala Harris hablando ante periodistas después de recibir un informe sobre la pandemia del coronavirus elaborado por expertos en salud pública durante un evento de campaña en Wilmington, Delaware, Estados Unidos. 13 de agosto, 2020. REUTERS/Carlos Barria (CARLOS BARRIA/)Además de las mencionadas figuras hablarán Nancy Pelosi, la presidente de la Cámara de Representantes y líder demócrata en el Congreso; la senadora progresista Elizabeth Warren, exrival de Biden en las primarias; y la gobernadora de Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, una de las figuras hispanas más prominentes de Estados Unidos.
Biden fue nominado oficialmente por el partido en la segunda jornada de la Convención, luego de la tradicional ceremonia en la que los delegados del partido le confirieran su apoyo.
“Muchas, muchas gracias desde el fondo de mi corazón. Gracias a todos. Significa mucho para mí y mi familia”, dijo Biden, de 77 años, tras la colorida votación nominal en la que todos los estados y territorios del país mostraron en mensajes ‘online’ su diversidad geográfica y cultural, una secuencia muy comentada en redes sociales.
El evento terminará el jueves, cuando Biden acepte oficialmente su nominación. De esa manera comenzará el último tramo de la campaña presidencial, que incluirá a su vez tres debates contra el candidato republicano.
Más sobre este tema:
Joe Biden fue nominado como candidato presidencial del partido demócrata para las elecciones de Estados Unidos
Quién es Jack Schlossberg, el último nieto de JFK que participó de la Convención Nacional Demócrata

Donald Trump anunció que activará un procedimiento en la ONU para restablecer las sanciones contra Irán

Donald Trump. REUTERS/Tom Brenner (TOM BRENNER/)El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció este miércoles que va a activar un controvertido procedimiento en la ONU para demandar el restablecimiento de todas las sanciones internacionales contra Irán.
“Hoy voy a pedirle al secretario de Estado, Mike Pompeo, que notifique al Consejo de Seguridad de la ONU que Estados Unidos quiere restablecer todas las sanciones de Naciones Unidas contra Irán que están suspendidas”, anunció Trump a los periodistas en la Casa Blanca.
En efecto, Pompeo tiene previsto reunirse, entre otros, con el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, según anunció el miércoles el portavoz del diplomático portugués.
En declaraciones previas en Washington, el jefe de la diplomacia estadounidense no quiso confirmar que el viaje tendría lugar el jueves, pero sí señaló su intención de acudir “pronto” a la ONU para iniciar un procedimiento que busca volver a imponer a Teherán las sanciones levantadas tras el pacto nuclear que selló con varias potencias internacionales y que EEUU ha abandonado bajo la Administración de Donald Trump.
En la imagen, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo. EFE/Peter Foley/Archivo
(PETER FOLEY/)El movimiento llega después de que el pasado viernes EEUU no lograra que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobase una resolución para extender el embargo de armas sobre Irán, que vence el próximo octubre.
El texto impulsado por EEUU únicamente logró el apoyo de la República Dominicana, mientras que Rusia y China votaron en contra y las potencias europeas se abstuvieron.
Ya desde antes de la votación, la Casa Blanca venía advirtiendo de que si no se extendía el embargo podría invocar una cláusula que forma parte del acuerdo nuclear de 2015 (el JCPOA, firmado por Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Alemania, China y Rusia, e Irán) y que fue diseñada para volver a imponer sobre Teherán todas las sanciones de la ONU que se habían levantado, pero solo en caso de que se comprobara que había violado el pacto.
En los últimos meses, Irán ha incumplido algunos de sus compromisos en respuesta a la ruptura del pacto por parte de EEUU y a la imposición de sanciones unilaterales por parte de Washington.
FOTO DE ARCHIVO: El presidente de Irán, Hassan Rouhani, en 68ª Asamblea General de las Naciones Unidas en New York, EEUU. 24 de septiembre de 2013. REUTERS/Ray Stubblebine (Ray Stubblebine/)Sin embargo, las potencias europeas, al igual que China y Rusia, cuestionan que EEUU tenga derecho a usar ese mecanismo en la ONU dado que abandonó el pacto de 2015 y dejó de cumplir con sus compromisos, por lo que se espera ahora una nueva batalla en el Consejo de Seguridad.
Este miércoles, preguntado al respecto, Pompeo defendió que esa cláusula fue validada en su día por la resolución 2231 del Consejo de Seguridad que respaldó el acuerdo nuclear y que, por tanto, debe cumplirse sin importar que Washington haya salido del acuerdo nuclear.
”La 2231 no es un documento de EEUU. Es un documento del Consejo de Seguridad. Tiene una serie de estipulaciones, tiene una serie de derechos y obligaciones, y nosotros vamos a estar en pleno cumplimiento de eso”, señaló.
Así, confió en que todos los países del mundo, incluidas el resto de potencias con asiento permanente en el Consejo de Seguridad, cumplan la cláusula.
Esta imagen de archivo publicada el 5 de noviembre de 2019 por el Organismo iraní de Energía Atómica muestra varias centrifugadoras en la planta de enriquecimiento de uranio en Natanz, en el centro de Irán. (Organismo Internacional de la Energía Atómica, via AP, Archivo)En principio, una vez que EEUU haga oficial su solicitud, el Consejo de Seguridad tendrá un plazo de 30 días si quiere aprobar una resolución que mantenga el levantamiento de las sanciones. Si eso no ocurre, se volverían a imponer automáticamente todos los castigos que pesaban sobre Irán antes de 2015, incluido el embargo de armas, una prohibición de actividades de desarrollo atómico y castigos contra personalidades y entidades.
Dado que tiene derecho de veto en el Consejo, Estados Unidos puede frenar la adopción de cualquier resolución y, sobre el papel, forzar el restablecimiento automático de las sanciones.
En los últimos meses, varios países han advertido de que eso supondría el fin del acuerdo nuclear, que por ahora Irán y las potencias firmantes -al margen de Estados Unidos- siguen tratando de mantener con vida.
Con información de AFP y EFE
MÁS SOBRE ESTE TEMA:
El programa nuclear de Irán ha mostrado su vulnerabilidad
EEUU condenó “firmemente” el golpe en Mali y exigió la libertad y seguridad del presidente
EEUU sancionó a compañías de Emiratos Árabes por su apoyo a una aerolínea iraní que llevó equipos técnicos a Venezuela