Colegio electoral en Pensilvania, EEUU (Europa Press) (Aimee Dilger/)Según el último recuento, con corte este mismo sábado, más de 90 millones de personas ya votaron en las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Esto equivale al 65% del total de boletas presentadas en los comicios de 2016.La mayoría de los expertos electorales cree que en estos comicios participarán entre 150 y 160 millones de personas, lo que supondría que se ha superado el ecuador de la votación.En Texas, ya se han emitido más votos de los que hubo hace cuatro años. Los 9 millones de texanos que sufragaron constituyen más de la mitad de todos los votantes registrados en el estado. La gran mayoría de esos votos fueron en persona.Los demócratas tienen una importante ventaja sobre el Partido Republicano en el voto anticipado -47% frente al 33%-, según el análisis realizado por la agencia de noticias AP con datos de la consultora política L2. Esto no significa que los demócratas vayan a ganar, pero sí incrementa la presión sobre los republicanos para lograr una ventaja similar, o mayor, el 3 de noviembre.Arizona, Florida, Georgia, Hawái, Montana, Nevada, Nuevo México, Carolina del Norte, Oregón, Tennessee y el estado de Washington informaron que al menos el 80% del total de votos de 2016 en esos estados se ha entregado.Si bien los números de votación anticipada están alcanzando niveles récord, todavía hay millones de boletas por correo que aún no se han devuelto. El análisis del Proyecto de Elecciones encontró 35 millones de boletas por correo pendientes hasta el viernes.Un hombre llena una papeleta durante la votación anticipada en Our Lady Help of Christians, en Staten Island, Nueva York, Estados Unidos. 25 de octubre, 2020. REUTERS/Andrew Kelly (ANDREW KELLY/)LOS NUEVOS VOTANTES PARTICIPANLa gran pregunta sobre participación en todos los comicios es: ¿qué partido está convenciendo a los nuevos votantes? Los datos muestran que los demócratas estarían ganando en ese campo, pero no necesariamente de una forma tan dramática como podrían sugerir algunos de los grandes datos globales.Según el análisis de AP, en más de 1 de cada 4 boletas presentadas por el momento, el 27%, eran de votantes nuevos o infrecuentes, personas que o bien nunca han votado antes o que lo han hecho menos de la mitad de las veces que pudieron participar. Parece una gran cifra, pero no es mucho más alta que en los últimos años. La firma de datos demócrata Catalist halló que en 2016 aproximadamente un cuarto del electorado no había votado en las anteriores presidenciales.Sin embargo, podría seguir subiendo ya que los novatos y los no habituales tienden a votar más cerca de la jornada electoral o el propio día. E incluso los pequeños cambios pueden marcar la diferencia en los estados donde la batalla entre Trump y el aspirante demócrata, Joe Biden, está más ajustada.Un aumento en ese sentido parece ser una buena noticia para los demócratas. El 43% de los votantes en esta categoría están registrados como demócratas, frente a un cuarto que se identifican como republicanos. El tercio restante aparece como independientes o de un partido minoritario, un grupo que suele favorecer a los demócratas.Los votantes se congregan en la región conocida como Cinturón del Sol, especialmente en estados como Florida, Carolina del Norte y sobre todo en Texas, que los demócratas esperan ganar movilizando a una gran parte del electorado que se abstiene en la mayoría de las elecciones.“Los demócratas ya están expendiendo su electorado”, dijo Tom Bonier, de la firma de datos demócrata TargetSmart. “Esto parecería favorable a Biden, pero hay que tener en cuenta la advertencia que hemos escuchado un millón de veces antes: no sabemos cuánta gente votará el día de las elecciones”.Imagen de archivo de personas haciendo fila para emitir sus sufragios afuera del Madison Square Garden, que es utilizado como local de votación, en el primer día de votación anticipada en Manhattan, Nueva York, Estados Unidos. 24 de octubre, 2020. REUTERS/Jeenah Moon/Archivo (JEENAH MOON/)LOS VOTANTES AFROAMERICANOS SE MANTIENEN FIELESEl destino de Biden podría estar ligado a una fuerte participación de los votantes afroamericanos en los estados en disputa. Por el momento, alrededor del 9% de las boletas anticipadas son de afroestadounidenses, casi a la par con el 10% de 2016, de acuerdo con una estimación de votantes realizada por Pew Research entonces.Los votantes afroamericanos están manteniendo su cuota en varias zonas en disputa. En Carolina del Norte suponen el 21% tanto en voto anticipado como en registros, mientras que en Georgia constituyen el 30% voto adelantado y el 32% de los electores registrados.Un ligero descenso en la elevada participación de los afroestadounidenses en 2008 y 2012 repercutió en la derrota de los demócratas cuatro años más tarde, y la formación y sus seguidores están observando atentamente qué ocurre en esta ocasión.Por el momento, los datos son ambiguos. Ha subido el número de afroestadounidenses mayores que han votado. Los de 65 años o más son ya una de los grupos demográficos más fiables en lo comicios, pero según los datos de TargetSmart, han mejorado su participación en seis estados clave: Arizona, Florida, Georgia, Nevada, Carolina del Norte y Texas.Al mismo tiempo, de acuerdo con el Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU, por sus siglas en inglés), los votantes afroamericanos más jóvenes, que son menos fiables, han depositado ya más votos que en 2016. Este es un indicio del aumento del compromiso de un sector del electorado que bajó en 2016.Según el sindicato, los votantes afroamericanos se están recuperando de los efectos de la pandemia del coronavirus y del colapso de la economía, que golpeó especialmente a su comunidad, además de las movilizaciones contra el racismo en el país. Esto les motiva a superar los persistentes obstáculos para votar, dijo Mary Kay Henry, presidenta internacional de SEIU.Un grupo de personas espera en fila para votar en el condado de Marion en Indianápolis, Indiana, Estados Unidos, el 23 de octubre de 2020. EFE /EPA /JUSTIN CASTERLINE
(JUSTIN CASTERLINE/)LOS DEMÓCRATAS ESPERAN UN BUEN RESULTADO ENTRE LOS JÓVENESEl análisis de AP mostró que, hasta el viernes, el 11,3% el voto anticipado había sido emitido por electores de entre 18 y 29 años. Esto supone un ligero incremento con respecto a este punto de la carrera electoral de hace 4 años, cuando los menores de 30 habrían presentado el 9,6% de las boletas, según TargetSmart.Y en los estados en disputa de Florida, Georgia y Carolina del Norte, el 30% o más de los jóvenes han participado ya, de acuerdo con los datos de la AP.Esto es, de nuevo, un buen indicio para los demócratas, aunque muy preliminar. Los jóvenes tienden hacia el Partido Demócrata y, cuando los demócratas se movilizan para votar, no es inusual que sus números sean más altos.El electorado joven batió récords en 2018, con una participación del 36% de su franja demográfica, según el censo de Estados Unidos. Esto ayudó a los demócratas a recuperar el control de la Cámara de Representantes.Existía cierta preocupación porque la pandemia causase un fuerte descenso de los registros de personas de 18 y 19 años, que podrán votar por primera vez. Sin embargo, el registro de jóvenes para votar es más alto en casi todos los estados esta vez que en 2016, según el Center for Information Research and Civic Learning and Engagement de la Universidad Tufts. Esto refleja tanto el aumento de la población como el alza de los registros para las elecciones de mitad de legislatura de 2018.¿UNA ALTA PARTICIPACIÓN INFLUIRÁ EN EL RESULTADO?Los republicanos sostienen que la participación récord que se prevé no tendrá mucha importancia en los estados en disputa. Según la campaña de Trump, cuando todas las boletas se hayan contado la participación en esas regiones clave será similar a la de 2016.“Es bastante predecible lo que han llevado al electorado”, afirmó Nick Trainer, director de estrategia para estados en disputa en la campaña del presidente, acerca de los demócratas. “Nosotros también movilizaremos a nuestros nuevos votantes”.Esta opinión disiente mucho de la mostrada por varios expertos electorales, que ven indicios de más entusiasmo en las zonas clave, tanto en el voto anticipado como en las encuestas.John Couvillon, un encuestador republicano que rastrea el voto anticipado, dijo que la campaña de Trump está siendo demasiado despectiva. “Oigo la misma actitud que en 2008, cuando los republicanos negaban la impresionante participación anticipada que estaba generando Obama”, apuntó.McDonald señaló que no hay forma de saberlo hasta el día de las elecciones.Sin embargo, destacó que, si la participación es baja, eso no es necesariamente una buena noticia para Trump dada la gran ventaja que tienen acumulada ahora los demócratas. Esto significaría que la campaña del presidente necesitaría ganar el martes por un margen aún mayor. “Es mejor que esperen estar equivocados”, afirmó.(Con información de AP)MÁS SOBRE ESTE TEMA:¿Puede Texas cambiar de color en estas elecciones presidenciales?Quiénes son los otros candidatos a la Casa Blanca, de Kanye West a un tal Phil CollinsPor qué los condados rurales de Florida podrían tener la clave para anticipar quién ganará el estado en las elecciones Trump mejora sus niveles de aceptación en la comunidad afroamericana en la recta final de las elecciones
Category Archives: EEUU
Nueva York anunció que impondrá el testeo de COVID-19 obligatorio para quienes quieran entrar al estado
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, que preside la Asociación Nacional de Gobernadores -demócratas y republicanos- dio a conocer este domingo que la pasada semana enviaron una carta al presidente Donald Trump con una extensa lista de preguntas para las que buscan respuestas lo más pronto posible. EFE/EPA/JUSTIN LANE/Archivo
(EFEI0342/)El estado de Nueva York ha reemplazado su lista de advertencias para el viajero en pandemia por una nueva política estricta de testeos generales, anunció el sábado el gobernador Andrew Cuomo.Según la nueva disposición, los viajeros procedentes de casi todos los estados del país deberán mostrar los resultados negativos del test realizado en algún momento durante los tres días previos a su llegada a Nueva York, además de permanecer en cuarentena durante tres días adicionales y hacerse un nuevo test de COVID-19 el cuarto día.Si es negativo, podrán circular con tranquilidad, en cambio, si el mismo resulta positivo, debrán aislarse durante dos semanas, dijo el gobernador durante una conferencia de prensa en Albany.“Cuatro días más tres días son siete días, y ese es básicamente, con toda probabilidad, el período de incubación”, dijo Cuomo, al anunciar que el viernes se registraron 2.049 nuevos casos en todo el estado y 8 muertes. “No habrá métricas. Habrá una regla que se aplicará en todo el país”, dijo el gobernador.Un trabajador del Servicio Postal pasa con un carrito frente al edificio de la Bolsa de Nueva York, EEUU. 26 octubre 2020. REUTERS/Mike Segar (Mike Segar/)Además, cualquiera que se niegue a hacerse la prueba deberá permanecer en cuarentena durante 14 días.Antes de la nueva disposición, había una cuarentena obligatoria de dos semanas para los viajeros que llegaban de áreas que se consideraba que tenían casos altos o en aumento de COVID-19.La política de pruebas se aplicará a todos los estados excepto Nueva Jersey, Pensilvania y Connecticut, mientras que aquellos que viajan entre estados fronterizos no estarán obligados a hacerse la prueba en cada viaje, agregó Cuomo.Los neoyorquinos que salgan del Estado por 24 horas deberán hacerse la prueba dentro de los cuatro días posteriores a su regreso.Mientras tanto, Cuomo dijo que los cierres selectivos del estado o el “enfoque de microgrupos” en los puntos calientes del virus en Brooklyn y Queens están funcionando, según la evidencia recogida en hospitales e instalaciones de atención médica.Un cliente se toma la temperatura afuera de una tienda Apple en Brooklyn, Nueva York, Estados Unidos. REUTERS/Brendan McDermid/File Photo/File Photo/File Photo (BRENDAN MCDERMID/)“Creo que con las zonas rojas y una aplicación más estricta de la ley llamamos la atención de la gente. Están enojados conmigo, pero la tasa de infección bajó y creo que hice lo que tenía que hacer”, dijo el Gobernador.El porcentaje promedio de casos positivos en las zonas de micro focos del estado es del 3%, mientras que la tasa de positividad en todo el estado de Nueva York es del 1,49%, la tercera más baja del país.Mejor que Nueva York está Maine, con una positividad del 0,97%, detrás del 0,53% de Vermont, según la Universidad Johns Hopkins.Si no se consideraran los llamados puntos calientes, la tasa de positividad del estado caería al 1,3%.“Los neoyorquinos deberían estar realmente orgullosos de lo que están haciendo”, dijo Cuomo. “Ser los terceros del país es muy bueno”.Actualmente, en el estado hay 1.121 personas hospitalizadas, de las cuales 248 están en unidades de cuidados intensivos y 122 intubadas. El estado fue el epicentro de la pandemia durante los meses de marzo y abril, en el periodo conocido como la primera ola.Con información de EFESEGUIR LEYENDO:Coronavirus: EEUU rompió el récord diario con más de 99.000 nuevos casosEspacios cerrados, multitudes y contacto cercano: los principales factores que aumentan el riesgo de contraer COVID-19
Victorias y derrotas del periodismo estadounidense en los cuatro años de Donald Trump
Kayleigh McEnany, secretaria de Medios y portavoz de la Casa Blanca, muestra durante una conferencia de prensa en junio una primera plana del “New York Post” REUTERS/Tom Brenner/File Photo (Tom Brenner/)WASHINGTON DC – Son muchas las preguntas, pero se puede empezar por una: ¿Hizo un buen trabajo el periodismo estadounidense en los cuatro años de Donald Trump? Y además de preguntas hay una certeza: el presidente nunca dejó de cuestionar a los medios tradicionales. Y eso, en vez de perjudicarlos, ¿los benefició?Con el final del mandato presidencial del republicano, y a la espera de saber si fue el único o suma un segundo, la paradoja trumpista es evidente. Ningún presidente criticó tanto y tan abiertamente al periodismo, ningún presidente le había puesto a los medios tradicionales la etiqueta de “fake news media”, pero es gracias a esa batalla que publicaciones como The New York Times o The Washington Post subieron notablemente su nivel de suscriptores. Es gracias a la asombrosa omnipresencia crítica del presidente que resucitaron medios en declive como The Atlantic, que ganaron impulso otros de gran prestigio como The New Yorker o que se consolidaron otros alternativos como Político, Vox, Axios, The Hill, The Intercept y unos cuantos más.“Trump necesita a los medios: para alimentar su ego, para enardecer a sus simpatizantes, para tener el barómetro de su estatus, para estructurar su comprensión del mundo. Los números récord en la industria de los medios de comunicación sugieren que prosperan con la ansiedad que se desprende de la Casa Blanca. Por ahora, esto es para muchas compañías de medios un acuerdo extrañamente rentable. Debajo de la retórica acerca de los enemigos hay un alarmante nivel de dependencia mutua”, escribió hace ya dos años The Atlantic, que destacó también el crecimiento en audiencia y facturación de cadenas de noticias como CNN, Fox News o MSNBC.Con sus cuestionamientos, Trump contribuyó a acelerar la transformación digital y el nuevo modelo de negocios de los medios tradicionales. Les abrió un futuro a esos medios que dice despreciar, los devolvió al centro de la escena.Forbes puso en su momento también el foco en un fenómeno lateral, pero también importante: el de los multimillonarios que compraron medios de comunicación de gran nombre pero difícil presente. “Desde Marc Benioff y su esposa comprando ‘Time’ a la viuda de Steve Jobs, Laurene Powell Jobs, que compró ‘The Atlantic’, o el multimillonario de la biotecnología Patrick Soon-Shiong, que compró ‘Los Angeles Times’ y el ‘San Diego Union-Tribune’”.También reverdeció la televisión como foro de discusión pública y gran entretenimiento. El “prime time” de los programas políticos nocturnos ofrece momentos asombrosos. Está Chris Cuomo con su programa “Prime Time” en CNN que de tanto en tanto le habla a la pantalla como si le hablara al presidente, al que llega a llamar “este tipo”. Cuomo es hermano de Andrew, gobernador de Nueva York, al que Trump destroza a críticas un día sí y otro también.Fox News gana grandes franjas de audiencia con programas como los de Sean Hannity, que se autodefine como amigo del presidente, o Laura Ingraham, de lengua filosa e implacable, que vio como esta semana Trump se mofaba de ella en un acto de campaña en Michigan.Dirgiéndose a ella en pleno acto, Trump ironizó. “No puedo reconocerte, ¿es eso un barbijo? No puede ser, ¿estás llevando una mascarilla? Nunca la vi con barbijo. Mírate, Laura, estás siendo muy políticamente correcta, uauh”.Laura Ingraham, TV host in Fox News, attends U.S. President Donald Trump’s campaign rally at Green Bay Austin Straubel International Airport in Green Bay, Wisconsin, U.S., October 30, 2020. REUTERS/Carlos Barria (CARLOS BARRIA/)Fox suele criticar a los hermanos Cuomo por intercambiar elogios entre sí en las frecuentes entrevistas que el hermano menor le hace al hermano mayor. Se trata, al fin, de un ida y vuelta frecuente en el que ambas cadenas se potencias citándose y criticándose mutuamente. Recientemente CNN dedicó 10 minutos a refutar a María Bartiromo, ex CNN y hoy en Fox, rescatando preguntas de sus entrevistas a Trump. En una de ellas, Bartiromo termina agradeciendo al presidente “por todo lo que hace”, y le dice que quiere volver a ir a la Casa Blanca a entrevistarlo, porque hace tiempo que no lo hace. “Estoy segura de que eso se puede arreglar”, comentó con sarcasmo Brianna Keilar en la CNN.Es Estados Unidos, pero por momentos parece Madrid en 2011, aquel mayo turbulento de los “indignados”. Casi todos están enojados, ya sea en contra o a favor, para dar forma a un ambiente que no existía hace unos pocos años. Los discursos, los gestos, las puestas en escena: casi todo tiene un voltaje inusitado.En un reciente artículo, el “Columbia Journalism Review” (CJR), la revista de periodismo de la Universidad de Columbia, llegó a una conclusión, a propósito de aquella frase que dice que “la historia la escriben los que ganan”.“Mirando el borrador de los últimos cuatro años de esta historia, es difícil concluir en que nosotros seamos los ganadores”, dice el CJR, que ofrece argumentos para su visión pesimista del estado de la profesión.“En noviembre de 2017, el Centro Internacional de Periodistas otorgó a Chris Wallace, de Fox News, un premio a la excelencia en periodismo. En su discurso de aceptación, señaló que los ataques del presidente Trump a los medios de comunicación amenazan la democracia, pero luego regañó a sus compañeros. ‘Incluso si Trump está tratando de socavar la prensa por sus propias y calculadas razones’, dijo Wallace, ‘cuando habla de la parcialidad en los medios de comunicación creo que tiene razón’”.El nombre de Wallace saltó al primerísimo plano un mes atrás como moderador del debate en Cleveland en el que Trump prácticamente no dejó hablar a Joe Biden. Un debate que forzó a incluir un sistema de silenciamiento del micrófono para el siguiente.FOTO DE ARCHIVO: El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el candidato presidencial demócrata Joe Biden en su primer debate de campaña presidencial de 2020 en Cleveland. Ohio, 29 sep 2020. REUTERS/Brian Snyder/File Photo (BRIAN SNYDER/)Tres años antes, Wallace advertía del peligro de que los periodistas y los medios tomen parte. Según él, los periodistas son “árbitros… testigos objetivos de lo que está pasando”. Marty Baron, director de The Washington Post, lo sintetizaría en seis palabras: “No estamos en guerra; estamos trabajando”.El impacto de la elección de 2016 aún se siente. Primero fue en las primarias republicanas, luego en la general contra Hillary Clinton. En una y otra situación, muchos medios se entusiasmaron al ver cómo subían sus cifras de audiencia con cada frase disruptiva de Trump. Luego, ya con el republicano en la Casa Blanca, ese entusiasmo se esfumó en parte.Autocríticos, medios como el The New York Times prometieron mejorar la cobertura de esos Estados del “cinturón de óxido” que sorprendieron con su apoyo a Trump y le dieron la presidencia. Abrieron corresponsalías allí e intentaron controlar la tendencia a ver todo bajo el prisma hiper politizado de la costa Este, de las élites de Washington DC y Nueva York.Cuatro años después, lo que se observa es que los vientos que buscan arrastrar a los medios a uno u otro “lado” (y anclarlos ahí) soplan con mucha más fuerza que en aquella elección. Las redes sociales ganaron un poder y una influencia que antes no tenían, hasta el punto de llevar a modificar la primera plana del The New York Times o terminar en la renuncia de su jefe de Opinión este año por una polémica columna de un senador republicano.Es el mismo diario que a fines de septiembre, poco antes del primer debate presidencial, publicó una profunda y documentada investigación acerca de los impuestos que realmente paga el presidente Trump. Se trata de un tema sensible, un asunto que históricamente interesa a los estadounidenses. Esta vez, en medio del fárrago de una campaña que incluyó todo tipo de situaciones, su impacto fue relativo.Mike Hisey dressed as U.S. President Donald Trump in a prison jumpsuit reads the New York Times in front of the New York Times office in the Manhattan borough of New York City, New York, U.S., September 28, 2020. REUTERS/Carlo Allegri TPX IMAGES OF THE DAY (CARLO ALLEGRI/)Hay críticas entre los medios también, la más reciente y ácida en un artículo de opinión en The Wall Street Journal bajo el provocador título de “Salvar al soldado Biden”. Lo firma William McGurn, miembro del consejo editorial del WSJ y, en su momento, autor de los discursos del presidente republicano George Bush (hijo). McGurn compara la campaña de 2016 con la de 2020: “En la era de Donald Trump, la objetividad de los medios era un lujo que Estados Unidos no podía darse. Pero se vio que la cobertura sesgada no era suficiente para impedir que Trump ganara. En lo que va de 2020, los medios aportaron una novedad: a Biden no hay que hacerle nunca una pregunta complicada”.Ben Smith, el crítico de medios del The New York Times publicó en septiembre una columna en la que analizaba la “creciente tentación de muchos periodistas”, en especial en la televisión, de adoptar una postura “dura” que satisfaga a aquellos que no simpatizan con Trump. En el texto cita a Frank Rich, ex columnista del Times y hoy productor ejecutivo de series de éxito en HBO como “Veep” y “Succession”.“Los muchos periodistas de los medios tradicionales que han estado siguiendo a Trump durante cuatro largos años, incluido yo mismo, corren inevitablemente el riesgo de convertirse en artistas de la interpretación para lectores agradecidos que ya están de acuerdo con nosotros”, dijo Rich a Smith. “Tienes que preguntarte si algo de esto ha influido en un solo votante de Trump”.“Miren las noticias por cable para ver los beneficios de hacer el papel del periodista de televisión indignado. La Casa Blanca era, antes del señor Trump, aburrida (…) con los reporteros encadenados a una interminable, a menudo vacía, secuencia de eventos y sesiones informativas ritualizadas. Ahora es un juego de moralidad sobre la verdad, en el que los reporteros se hacen famosos al enfrentarse al señor Trump”, evalúa Smith.The Washington Post coincidió recientemente con ese análisis. En su cuenta de Instagram @coveringpotus (Cubriendo al presidente de los Estados Unidos), destacó que en la recta final hacia las elecciones las “entrevistas confrontativas con funcionarios de Trump se convirtieron en un ritual de los canales de cable”, y muestra cuatro ejemplos, tres de CNN y uno de MSNBC. View this post on Instagram In the months leading up to Election Day, confrontational interviews with Trump surrogates have become a cable-news ritual. A post shared by Covering POTUS (@coveringpotus) on Oct 27, 2020 at 6:41am PDTLa presión que el estilo único de Trump le genera a los medios tensa la cuerda al máximo. Durante buena parte de su presidencia, uno de los debates en el mundo del periodismo fue si era correcto o no decir que el presidente mentía. Marie Louise Kelly, de la National Public Radio (NPR), explicó por qué, pese a haberse encontrado con situaciones en las que Trump describe una realidad inexistente, optó por no decir nunca que el presidente mentía. Muchos de sus oyentes le pedían que usara la palabra “mentira”.La periodista fue al “Diccionario de inglés de Oxford” para buscar la definición de “mentir”. “Lo que dice es que se trata de ‘una afirmación falsa con la intención de engañar’. La palabra clave aquí es ‘intención’. Sin la capacidad de meterme en el cerebro de Donald Trump, yo no puedo decirle a la gente cuál era su intención. Puedo decirle lo que dijo y en qué medida eso coincide, o no, con los hechos”.SEGUIR LEYENDO:Todos nos equivocamos, esta vez le tocó al New York TimesLa campaña presidencial de Donald Trump denunció un ciberataque a su página web
EEUU elevó la alerta de viaje a Venezuela a su nivel más alto
En las últimas 24 horas, cuatro personas fallecieron en Venezuela por COVID-19, con lo que ya son 793 los muertos por la enfermedad en el país desde el inicio de la pandemia, informó el viernes el ministro de Comunicaciones, Freddy Ñañez (EFE/Rayner Peña/Archivo) (RAYNER PENA R/)El Departamento de Estado de EEUU actualizó la alerta de viaje para Venezuela y la elevó al nivel 4, el más alto de este sistema de alarmas, que recomienda “No viajar” al país caribeño.La advertencia, divulgada en redes sociales por la Embajada Virtual de EEUU para Venezuela, sugiere a los ciudadanos estadounidenses no ingresar a a este país “debido al COVID-19, los crímenes, disturbios civiles, mala infraestructura de Salud, secuestros y arrestos arbitrarios″.La Embajada Virtual de EEUU para Venezuela compartió la nueva alerta de viaje en su cuenta de TwitterY señaló que la administración norteamericana tiene “capacidad limitada” para brindar servicios de emergencia a los ciudadanos estadounidenses en Venezuela.“El 11 de marzo de 2019, el Departamento de Estado de EEUU anunció el retiro del personal diplomático de la Embajada de EEUU en Caracas. Todos los servicios consulares, de rutina y de emergencia, están suspendidos hasta nuevo aviso”, explicó la alerta de viaje, que incluye un resumen de la situación en el país con el régimen de Nicolás Maduro.“Los delitos violentos, como homicidios, robos a mano armada, secuestros y robo de coches, son comunes. Se producen mítines y manifestaciones políticas, a menudo con poca antelación. Las manifestaciones suelen suscitar una fuerte respuesta de la policía y las fuerzas de seguridad que incluye el uso de gases lacrimógenos, aerosoles de pimienta, cañones de agua y balas de goma contra los participantes y, ocasionalmente, se convierten en saqueos y vandalismo”, advierte el informe.Y añade: “Hay escasez de alimentos, electricidad, agua, medicamentos y suministros médicos en gran parte de Venezuela. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC) emitieron un aviso de Nivel 3 “Evitar viajes no esenciales” el 15 de mayo de 2018 debido a la inadecuada atención médica y a la ruptura de la infraestructura médica en Venezuela”.Nicolás Maduro en Caracas, Venezuela, el 28 de octubre de 2020 (Palacio de Miraflores/Handout via REUTERS) (HANDOUT/)“El acceso consular a los ciudadanos estadounidenses detenidos que también tienen la nacionalidad venezolana está severamente restringido por el gobierno venezolano y la Embajada de los Estados Unidos puede no recibir acceso en estos casos. Las fuerzas de seguridad han detenido arbitrariamente a ciudadanos estadounidenses durante largos períodos. Las autoridades venezolanas no pueden notificar a la Embajada de los Estados Unidos la detención de un ciudadano estadounidense, y el acceso consular a los detenidos puede ser denegado o severamente retrasado”, remarca la advertencia.Por último, la alerta señaló una serie de recomendaciones en caso de que un ciudadano decida viajar a Venezuela:-No viaje entre ciudades después de que oscurezca.-Evite viajar entre el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar y Caracas de noche.-No tome taxis no regulados del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar, y evite los cajeros automáticos en esta área.-Inscríbase en el Programa de Inscripción de Viajeros Inteligentes (STEP) para recibir alertas y facilitar su localización en caso de emergencia.-Lleve un suministro suficiente de medicamentos de venta libre y con receta médica, y-Evite las manifestaciones.Seguir leyendo:Maduro reconoció que en Venezuela queda gasolina solo para 20 díasTrump aseguró que, de ser reelegido, mantendrá su política contra la dictadura de Nicolás Maduro
Estados Unidos registró más de 92.000 casos de COVID-19 en las últimas 24 horas, un nuevo récord desde el inicio de la pandemia
Una persona con máscara facial camina por las calles de Washington, Estados Unidos, durante la pandemia de coronavirus. REUTERS/Leah Millis (LEAH MILLIS/)Estados Unidos llegó este viernes a un nuevo récord de casos diarios de coronavirus -se registraron más de 92.000 infectados en las últimas 24 horas- y superó así los nueve millones de contagios reportados desde el inicio de la pandemia, según un recuento de la Universidad Johns Hopkins.El país sufrió su peor semana en cuanto a transmisiones registradas, lo que ilustra un recrudecimiento de la tercera ola cuando faltan solo cuatro días para las elecciones presidenciales.La nación más afectada del mundo, al menos en términos nominales, acumula 9.034.295 de infecciones, de acuerdo con el conteo en tiempo real de la universidad con sede en Baltimore. Además, la cantidad de personas que han muerto a causa del virus se acerca a los 230.000. Estados Unidos concentra así el 19,8 por ciento de los 45,3 millones de casos de la covid-19 en el mundo, y el 19,35 por ciento de los 1.185.200 fallecidos a nivel global.Florida, el tercer estado con más casos y el cuarto con más muertes de Estados Unidos, de acuerdo con la Universidad Johns Hopkins. EFE/EPA/ALEX EDELMAN/Archivo
(EFEI0658/)El covid-19 se expande actualmente a mayor velocidad en el centro oeste del país, que el jueves llegó a un nuevo récord de infecciones diarias, con más de 91.000 casos en 24 horas.Nueva York y otras partes del noreste también están experimentando un aumento preocupante de los contagios a medida que avanza el otoño.Mientras, el presidente Donald Trump continúa la campaña para alcanzar a su rival demócrata Joe Biden, quien ha criticado la respuesta del virus del mandatario y lo aventaja en los sondeos.Trump minimiza el virus incluso cuando el número de víctimas ha vuelto a acelerarse, y transita la recta final de la campaña con varios actos presenciales en los que raramente hay distanciamiento social o uso de mascarillas por parte de los asistentes.Democratic U.S. presidential nominee and former Vice President Joe Biden waves during a drive-in campaign stop, in Des Moines, Iowa, U.S., October 30, 2020. REUTERS/Brian Snyder (BRIAN SNYDER/)En repetidas ocasiones ha dicho a sus partidarios que el virus se está yendo y que país está “doblando la curva”.Según difundió este viernes su equipo, Trump tiene previsto realizar otros catorce mítines en tres días antes de poner fin a su campaña electoral de cara a las presidenciales. Los eventos tendrán lugar a partir de este sábado con cuatro mítines en diferentes ciudades del estado de Pensilvania. El domingo, el mandatario tiene previsto dirigirse a Míchigan, Iowa, Carolina del Norte, Georgia y Florida, mientras que el lunes volverá a Carolina del Norte, Pensilvania y Míchigan, además de desplazarse hasta Wisconsin.Trump se encuentra a 7,8 puntos porcentuales del candidato demócrata y ex vicepresidente del país, Joe Biden, en las encuestas realizadas a nivel nacional sobre intención de voto, tal y como señala RealClearPolitics. Sin embargo, la carrera hacia la Casa Blanca está reñida.El presidente se ha apoyado en gran medida en sus característicos mítines para acortar la distancia que le separa de Biden desde que se recuperó de a COVID-19 a principios de este mes. Sin embargo, su campaña ha quedado muy por detrás de la de su rival en la recaudación de fondos desde el pasado mes de agosto, lo que ha permitido a Biden ocupar la franja publicitaria en los ‘estados bisagra’, especialmente en la radio y la televisión.Donald Trump en campaña en el Aeropuerto Internacional de Green Bay Austin Straubel, Wisconsin, Estados Unidos. REUTERS/Carlos Barria (CARLOS BARRIA/)Biden, por su parte, no ha llevado a cabo grandes mítines ni eventos de campaña debido a la pandemia de coronavirus, motivo por el que Trump ha sido criticado tanto a nivel local como nacional.Con información de AFPSEGUÍ LEYENDO:Algunos sobrevivientes de COVID-19 tienen anticuerpos que atacan a su cuerpo, no al virus
“Pesadilla” en Nueva York: un hombre cayó en un nido de ratas cuando cedió la vereda donde caminaba
El terrible accidente de Leonard Shoulders en El Bronx (Infobae)Una cámara de seguridad en Nueva York registró el aterrador momento en el que un hombre cayó al fondo de una cloaca repleta de ratas cuando caminaba tranquilamente por una vereda del Bronx, un distrito de Nueva York.Leonard Shoulders, de 33 años, quedó traumatizado y necesito atención médica como consecuencia del incidente, que tuvo lugar el pasado sábado pasado cerca de una parada de autobús. El neoyorquino cayó unos 4,5 metros de altura cuando la vereda se abrió bajo sus pies. Quedó atrapado durante unos 30 minutos que, según testigos, sufrió como si viviera “una pesadilla”.“Las ratas se arrastraban sobre él, no podía moverse”, contó su hermano, Greg White, a la cadena CBS de Nueva York. “No quería gritar porque temía que entraran ratas en su boca”, explicó.Los bomberos fueron llamados a la escena y un equipo de emergencia logró sacarlo de la obra bajo tierra. “Miré hacia abajo y el hombre sólo movía la mano”, agregó un testigo.Una filmación de la televisión local luego mostró cómo fue ingresado a una ambulancia en una camilla por heridas en los brazos, las piernas y el rostro. Shoulders fue trasladado al hospital St Barnabas, donde permanece en condiciones estables desde el jueves, según informaron los médicos al New York Times.Su madre, Cindy White, dijo a la cadena NBC que él está traumatizado por lo que le ocurrió. “Recuerda que se fue directo para abajo, y estaba cayendo, cayendo, y los escombros caían y le golpeaban en la cabeza”, contó la mujer.Los testigos también quedaron impresionados por el accidente y, sobre todo, por la presencia de las ratas, que circulan en Nueva York desde hace mucho tiempo pero con la pandemia del coronavirus han estado saliendo más frecuentemente de sus madrigueras en busca de comida, según reportaron los expertos en roedores.Este incidente se encuentra bajo investigación y algunas autoridades locales señalaron que el derrumbe de una sección de la vereda ocurrió sobre una bóveda que estaba en mal estado.“Era como una posibilidad entre un millón de que eso ocurriera”, dijo el hermano de la víctima. “Él está muy conmocionado, y eso me sorprendió. Pero bueno, está respirando”, afirmó el miembro de la familia, que ha dicho al New York Times que se está considerando una acción legal.En la zona se instaló un vallado alto y un grupo de inspectores ordenó desocupar el edificio más cercano al hueco, pero aún no está claro quién es el dueño de la construcción ni quién es el responsable de mantener el pavimento en su frente.Seguir leyendo:El momento en que un edificio turco se desploma por el terremoto en el Mar EgeoUn hombre se desmayó al volante y mató a dos personas e hirió a otra en pleno centro de Kiev
Trump mejora sus niveles de aceptación en la comunidad afroamericana en la recta final de las elecciones
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. Foto: REUTERS/Carlos Barria (CARLOS BARRIA/)A solo cuatro días de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el presidente Donald Trump recibió una encuesta con un resultado positivo que probablemente no esperaba: un incremento de tres puntos porcentuales en sus niveles de aceptación por parte de la comunidad afroamericana. La preferencia de este demográfico por el partido demócrata es de larga data. En 2016, el 89 por ciento de los votantes afroamericanos eligió a Hillary Clinton. Tradicionalmente se estima que al menos un 65 por ciento de la comunidad vota por el partido en cualquier elección contemporánea. Su importancia está lejos de ser menor. Según el Pew research center, este año llegarán a una cifra récord de 30 millones de votantes. El actual candidato demócrata, Joe Biden, goza de altos niveles de aceptación entre los miembros de la comunidad afroamericana. De hecho, su repunte en las primeras se debió en gran medida a su apoyo en el sur del país, siendo el estado de Carolina del Sur el caso más emblemático. No obstante, según un reciente estudio publicado por Rasmussen, 30 por ciento de votantes afroamericanos registrados indicaron que tienen intención de votar por el Presidente Donald Trump. Es un avance relevante comparado con lo mal que le fue a Trump con esta comunidad 4 años atrás. El número está llamando la atención también porque en menos de una semana la cifra creció un 3 por ciento.En qué consiste el plan de última hora de Trump por conquistar el voto afro-americanoEn buena medida, la asociación de la imagen del presidente con íconos culturales populares de la comunidad parece estar dando sus frutos. Ayer mismo Trump se presentó en el centro de Florida junto al rapero Dwayne Carter Jr, más conocido como Lil Wayne.Lil Wayne. Foto: Jeff Hanisch-USA TODAY Sports (Jeff Hanisch/)El artista de 38 años, oriundo de Nueva Orleans, se reunió con el presidente en Tampa y compartió la foto a con sus 13 millones de seguidores no sólo que piensa votar por Trump, sino que lo apoya específicamente por el plan de reforma al sistema judicial que su administración presentó.Pero Lil Wayne no es el único rapero que se acercó a Trump. O’Shea Jackson, conocido popularmente como Ice Cube, anunció semanas atrás junto al presidente un plan de inversión federal de 500 mil millones de dólares para empresas fundadas por afro-americanos y se negó a participar de una llamada via Zoom con Kamala Harris, candidata a la vice-presidencia de Joe Biden.Juaquin Malphurs, cuyo nombre artístico es Waka Flocka Flame, fue citado por diversos medios de la industria del entretenimiento asegurando que el Presidente Donald Trump ha hecho más por la comunidad afro-americana que el propio Presidente Barack Obama (primer presidente afroamericano en la historia del país). Waka Flocka Flame fue criticado por este comentario pero lo defendió en sus redes sociales.El propio Kanye West ha apoyado públicamente al Presidente Trump, y si bien luego se desdijo cuando anunció su propia carrera a la Casa Blanca, aún en las entrevistas pide a la gente que voten por Trump si no lo harán por él.Está claro que Trump no ganará la mayor parte del voto afro-americano, pero mejorar su performance con esta comunidad puede ser de gran ayuda en estados donde el voto es muy reñido.Más sobre este tema: Trump presentó el que será su “plan del sueño americano para la comunidad hispana” si logra la reelección: sus principales puntosLa campaña presidencial de Donald Trump denunció un ciberataque a su página web
Adoptaron cuatro hijos y luego se enteraron de que esperaban cuatrillizos: “Pensamos que no podía embarazarme”
Maxine Young y su esposo Jacob Young viven en el condado de Berks, Pensilvania, y en una serie de eventos del destino han tenido nueve hijos en un periodo de sólo cuatro años.Se casaron en 2016 y de lo único que estaban seguros es de que querían una familia. La idea de adoptar fue un anhelo de Maxine desde niña, al platicarlo con Jake, a él también le entusiasmó la idea de adoptar.Planeaban que fueran dos hijos, y con eso estarían bien, sin embargo, el destino fue más allá. En 2017 iniciaron el proceso de adopción y tres hermanitos tenían problemas para ser adoptados juntos, a los Young les pareció buena idea y los aceptaron de inmediato.Mientras cuidaban a los tres hermanos, la pareja recibió otra llamada preguntando si estarían dispuestos a adoptar a la hermana pequeña de los niños (Elliot) ya que acababa de nacer, y su madre biológica no era capaz de cuidarla. Ellos sintieron la responsabilidad de mantener a los hermanos juntos, y dijeron que sí.“Le dijimos que sí a su hermanita y fue uno de los mejores sí de mi vida”, dijo Maxine Young al portal Newsweek. “Elliot y yo somos tan cercanos. Me río con Jake de que ella es mi verdadera alma gemela “.Anteriormente habían hecho dos rondas de fertilización in vitro (FIV) pero no se lograron y Maxine tuvo dos abortos espontáneos, por lo que probaron con inseminación intrauterina (IIU), y en ese proceso tuvieron a su primer hijo biológico, Henry, que nació en octubre de 2018.Con cinco hijos su familia ya estaba completa, pero la gran sorpresa llegaría pronto para poner su mundo de cabeza.”No pensé que podría quedar embarazada sin hacerme una FIV o una IIU. Entonces, cuando me hice una prueba de embarazo en enero de este año, me sorprendió mucho ver un resultado positivo.“Al principio estaba emocionada, pero eso se convirtió rápidamente en nerviosismo”, dijo. “Los médicos hicieron que pareciera que sería imposible tener cuatro bebés sanos y querían que redujéramos la cantidad. Una vez que aceptamos que sería arriesgado, sentimos que la alegría regresaba. Nuestros cuatro bebés estaban sanos. Estoy tan contenta de haber seguido nuestro instinto”, dijo Maxine en Good Morning America.Ella es una ama de casa de tiempo completo, con nueve hijos sería difícil que fuera de otra forma. Jake trabaja en la industria del petróleo y el gas, aunque mantiene horarios flexibles.Cuando los cuatrillizos llegaron a su casa estaban rodeados de familiares que los ayudaban con los nueve pequeños las primeras semanas pero pronto quisieron hacerse cargo de todo.Se suponía que los niños mayores irían a la escuela, sin embargo con la pandemia toda la familia ha permanecido en casa, y los mayores suelen ayudar con los bebés.“Jake y yo siempre hemos dicho que sentimos que somos los padres y queremos que nuestros hijos sean solo niños. No queremos una situación en la que los niños mayores se ocupen mucho de los niños más pequeños. Así que ayudan cuando quieren ayudar y, a menudo, quieren cargar a los bebés”, dijo la mamá de nueve.La pareja ha explicado que no hacen diferencias por sus cinco hijos biológicos y que a aman a todos exactamente igual: “Siempre les hemos explicado a los niños que la sangre no forma una familia, es a quien amas. El amor hace a una familia”.También han considerado que prosperan en el caos. “Los aspectos positivos de tener una familia numerosa superan con creces los aspectos negativos”.Saben que aunque les encantaba viajar o salir, ahora con nueve no podrán hacerlo en mucho tiempo, además de por la pandemia de coronavirus actual.“Nuestra familia funciona y no podemos imaginarnos tener solo uno o dos hijos ahora”, concluyó Maxine.MÁS SOBRE ESTE TEMA:Tuvo cuatrillizos en cuarentena: a 1.500 kilómetros, su marido es padre primerizo por foto18 años después: la increíble historia de los septillizos que conmovieron a Estados Unidos“Pensé que tenía cáncer pero no eran tumores: estaba embarazada de cuatrillizos”Tuvo octillizos y ahora se desnuda para pagar el alquiler
Por qué los condados rurales de Florida podrían tener la clave para anticipar quién ganará el estado en las elecciones presidenciales
Fila para votar en el condado de Pinellas, en Florida. Foto: REUTERS/Octavio Jones (OCTAVIO JONES/)Durante las últimas décadas, Florida ha sido un estado determinante en las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Los 29 votos electorales que otorga -el tercero en cuanto a magnitud a nivel nacional junto con Nueva York- lo hace atractivo de por sí. Pero si además se tiene en cuenta que se mantiene como estado pendular en cada elección que se sucede -es decir, que su resultado es incierto hasta el día de los comicios- la posibilidad de ganarlo lo convierte tal vez en el campo de batalla más atractivo para demócratas y republicanos.Desde 1964 el candidato que ganó Florida también se alzó con la presidencia, algo que ilustra el peso de sus votos electorales. En este ciclo, no obstante, la ventaja en las encuestas de Joe Biden sobre Trump muestran que el territorio reviste mayor importancia para las aspiraciones del actual presidente. En Florida, los sondeos los muestran en un empate técnico. Aún si Biden perdiera Florida, las prácticamente ciertas posibilidades de que gane California y Nueva York implican que tiene varios escenarios posibles en los que puede llegar a los 270 votos que le asegurarían la Casa Blanca. Si Donald Trump no obtuviera los votos de Florida, tendría que compensarlos ganando al menos dos de los tres estados de los grandes lagos: Michigan, Wisconsin y Pennsylvania. Entre los tres suman 46 votos electorales. Son estados en disputa, pero no tan peleados como Florida. Según el último promedio de encuestas del medio especializado Real Clear Politics, en estos tres estados Biden tiene una ventaja de entre 4 y 6 puntos sobre Trump.Para ganar la Florida, con una población tan dividida políticamente, cada voto cuenta. Hay algunas certezas a medias. Una de ellas es que Biden posiblemente gane el condado más grande del estado, Miami-Dade, dada la tendencia histórica del territorio. Pero el tema allí está en cuán grande sea la diferencia, dado que se presume sufrirá pérdidas en los condados más conservadores del norte del estado.Vista de urna oficial para las elecciones presidenciales en Westchester Library en Miami, Florida (EE.UU.), hoy 30 de octubre de 2020. EFE/Cristobal Herrera-Ulashkevich
(EFEI0499/)Generalmente se dice que las elecciones en Florida se definen en el corredor I-4. El nombre hace referencia a una autopista que cruza de este a oeste la península en el centro, atravesando las ciudades de Daytona, Orlando y Tampa.No obstante, según los expertos, la clave para empezar a entender los resultados de Florida no está ni en el gran condado del sur, Miami-Dade, ni en el poderoso corredor de la I-4, sino en los pequeños condados rurales.Estas áreas, de clara tendencia republicana, fueron vitales para la victoria de Donald Trump cuatro años atrás. En Florida, los votos anticipados se cuentan antes del cierre de la jornada electoral pero no se reportan hasta que cierran las mesas de votación. Eso quiere decir que para aproximadamente las 7 y media de la tarde del 3 de noviembre se conocerá una cantidad sustancial de resultados de todos aquellos que este año votaron masivamente de manera anticipada. Y eso puede ser un gran indicativo.Si es cierto que Biden necesita ganar masivamente en Miami-Dade para ser competitivo en el estado, es igualmente cierto que Trump tiene que sacar una amplia ventaja en los pequeños condados rurales para compensar pérdidas en áreas urbanas.Allí es donde los resultados que aparezcan a comienzos de la noche del martes en condados pequeños pueden ser esclarecedores. Como ejemplo se puede tomar el condado de Pasco, sobre la costa del golfo de México.Personas esperan en fila para votar de manera anticipada en Floida. Foto: REUTERS/Gregg Newton (GREGG NEWTON/)Para poder ganar Florida, Trump debería mantener allí los altos niveles de votación que tuvo en 2016. En aquel entonces, Trump sacó 21 puntos de diferencia en Pasco sobre Hillary Clinton. La diferencia fue muy superior a los 7 puntos de diferencia que había obtenido Mitt Romney sobre Barack Obama en 2012.Si nos centramos en el caso de Romney, este republicano ganó en todos estos condados rurales de Florida, pero la diferencia fue menor a diez puntos, por lo que no fue suficiente para contrarrestar la ventaja de Obama en centros urbanos. Como es sabido, el demócrata se quedó con el estado en 2012.Trump debería mantenerse por encima de los 10 o 15 puntos porcentuales en este tipo de condados apenas cerrados los centros de votación, para ser competitivo en el estado. Y nada indica que no lo vaya a ser. En definitiva, un buen indicador del interés en votar está en la capacidad de registrar nuevos votantes de cada campaña, y en Florida, este año, los republicanos registraron considerablemente más nuevos votantes que los demócratas.En definitiva es como lo predijo el periodista Tim Russert en la cadena NBC en el año 2000, en buena medida la elección se reduce a “Florida, Florida, Florida”.Más sobre este tema: Joe Biden aseguró que “si Florida se tiñe de azul” tendrá asegurada la victoria en las elecciones¿Los cubanoamericanos le darán el triunfo a Trump en Florida?
Estados Unidos reportó más de 88.000 nuevos casos de COVID-19, récord desde el inicio de la pandemia
Un votante y su hijo, ambos con una máscara protectora debido a la pandemia del COVID-19, dejan una boleta de ausencia en el Barclay Center, que se utiliza como centro de votación, en el primer día de la votación anticipada en Manhattan, EEUU, el 24 de octubre de 2020. REUTERS/Jeenah Moon (JEENAH MOON/)Estados Unidos reportó 88.452 nuevos casos positivos de coronavirus este jueves, estableciendo un nuevo récord diario de infectados en el país, según datos del Covid Tracking Project. Además, se confirmaron 1.049 muertes adicionales debido al virus, por lo que la cifra ya se acerca a los 230.000. Actualmente hay más de 46.000 personas hospitalizadas, lo que sugiere que la nación ya está inmersa en una tercera ola de contagios, que expertos anticiparon puede ser peor a las dos anteriores, ya que se aproximan los meses de invierno. De hecho esta es la cuarta vez en la semana que se reporta un récord de casos positivos.Nueva York y los estados del noreste de Estados Unidos, que durante mucho tiempo mantuvieron bajo control el coronavirus tras haber sido duramente afectados por la pandemia en la primavera, son ahora escenario de un fuerte aumento de los contagios, lo que genera temores de un regreso de las restricciones impuestas hace aproximadamente seis meses.La zona está aún lejos de padecer un brote descontrolado, como se está produciendo en ciertos estados del Medio Oeste o en Europa, pero las cifras están claramente en ascenso y los gobernantes están cada vez más preocupados. Según reportó The New York Times, la tendencia continúa y a velocidades vertiginosas: además de los territorios mencionados, 20 estados reportaron cifras récord de contagios en los últimos días. Entre ellos se cuentan Illinois, Tennessee, New Mexico, Nebraska y Utah.El alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, dio a conocer cifras el jueves que muestran una duplicación de la tasa de contagios en la metrópolis más grande de Estados Unidos. La ciudad ha registrado un número récord de muertes por el virus: más de 23.000 desde marzo (por encima de 33.000 en el conjunto del estado de Nueva York). Tras un largo periodo en el que la tasa de contagios se estabilizó en torno al 1%, el alcalde consideró este jueves “muy preocupante” el 2,7% registrado el día anterior, con una media cercana al 2% durante la semana pasada.En la imagen un registro del alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, quien subrayó que “la gente no debería viajar durante las vacaciones a menos que sea absolutamente necesario”, pues las posibilidades de infectarse de covid-19 en otras zonas es alta. EFE/Justin Lane/Archivo
(EFEI0023/)Nueva Jersey, el segundo estado más afectado de la región en la primavera boreal, presenta actualmente más de 1.000 casos nuevos cada día, y la tasa de positividad ha alcanzado el 6,5%, tuiteó el jueves el gobernador Phil Murphy. Al menos dos ciudades de ese estado, entre ellas Newark, muy cercana a Nueva York, han restablecido restricciones, como el toque de queda para la gente que realiza actividades no esenciales.Los casos también están creciendo en Pensilvania, Connecticut y Massachusetts. Este aumento representa un nuevo dolor de cabeza para las autoridades que, ante el avance de la pandemia en el sur, el medio oeste y el oeste del país, han impuesto cuarentenas a los visitantes de estados que presentan tasas de positividad superiores al 10%, como Nueva York, por ejemplo. La medida es difícilmente aplicable a los estados cercanos, cuyos habitantes circulan entre unos y otros por razones laborales o comerciales.El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, renunció recientemente a sumar a Nueva Jersey y Connecticut a su lista de más de 40 estados sometidos a cuarentena, llamando únicamente a evitar los desplazamientos no esenciales a esos estados.Además, las autoridades de Wisconsin debieron abrir un hospital de campaña ante la saturación de su capacidad sanitaria; y Dakota del Norte, que había reportado una cantidad relativamente baja de casos, abandonó sus esfuerzos de rastreo ante su incremento exponencial.El miércoles, el principal epidemiólogo de la Casa Blanca, Anthony Fauci, dijo que si bien espera que se apruebe una vacuna contra el COVID-10 “en los próximos meses”, no cree que el país vuelva a tener “algo parecido a la normalidad hasta finales de 2021 o iniciado el 2022”.Fauci también se mostró preocupado por el avance de la pandemia en el país. Dijo que la situación está “empeorando cada vez más”. En términos nominales, Estados Unidos es el país más afectado por la pandemia a nivel global.Con información de AFPSeguir leyendo:Joe Biden aseguró que “si Florida se tiñe de azul” tendrá asegurada la victoria en las eleccionesAdvierten que la segunda ola de COVID-19 será peor que la primera